El esloveno Aleksander Ceferin, presidente de la UEFA, ha asegurado este jueves que la decisión del Comité Ejecutivo del organismo de mantener la ventana internacional de septiembre para la vuelta de los encuentros de equipos nacionales evita que el fútbol de selecciones "sufra más daños".
De no haber definido el programa competitivo de esta manera, en su opinión, "se sentiría con especial dureza en el nivel de base". "Como guardianes del juego en toda Europa, no podemos permitir que eso suceda", aseveró.
"La decisión de aplazar la Eurocopa 2020 ha tenido un costo significativo para el fútbol de las selecciones nacionales y las asociaciones miembros de la UEFA, pero ha permitido que las competiciones nacionales en toda Europa se jueguen hasta el final, lo que, a su vez, ha sido enormemente beneficioso tanto para el fútbol de clubes como para el internacional", dijo Ceferin.
"Los cambios introducidos en el calendario de fútbol europeo, acordados por la UEFA, la ECA y las ligas europeas, también permitirán mantener los partidos internacionales en un período que es un elemento importante y de larga duración del calendario de partidos internacionales", señaló.
El Ejecutivo de la UEFA, reunido de forma telemática entre el miércoles y el jueves para definir el programa de las competiciones internacionales de clubes y selecciones, entre otras cuestiones, decidió que los encuentros de la fase de grupos de la Liga de Naciones 2020-21 comiencen a disputarse en septiembre con dos jornadas (3/4/5 y 6/7/8).
España visitará a Alemania el día 3 de septiembre dentro del grupo 4 de la Liga A y el 6 recibirá a Ucrania. El tercer encuentro lo disputará de nuevo en casa el 10 de octubre ante Suiza, el 13 jugará en el feudo ucraniano. Un mes después se enfrentará a domicilio al cuadro helvético y cerrará esta fase como local ante la escuadra germana el 16 de noviembre.