La carrera del siglo: el Celtic cazará al Rangers en ligas 96 años después

Todavía falta la confirmación matemática, pero todo el mundo ya sabe la buena no tan nueva: el Celtic será campeón de la Liga Escocesa. Un título que no sorprenderá a muchos, pues esta será la 13ª liga de los de Parkhead en las últimas 14 ediciones, pero que tiene un simbolismo y un significado especial para todos los aficionados del equipo.
La nueva corona será la 55ª para los católicos, lo que supone que igualan en el palmarés histórico del campeonato a sus gran rival, el Rangers, contra el que cada año disputan el memorable Old FIrm en al menos un par de ocasiones.
Esas 55 ligas por barba reflejan la dicotomía de un torneo en el que deben alinearse los astros y alguien debe juntar todas las Bolas de Dragón para que uno de los conjuntos de Glasgow no termine festejando. Sin embargo, la paridad que tendrá lugar en este 2025 será un hito histórico para el Celtic.
Y es que por primera vez en prácticamente un siglo (en 96 años concretamente), los de Celtic Park no estarán por debajo en el palmarés del torneo de un eterno rival que lleva siendo el rey del campeonato de la regularidad casi desde el origen del mismo a finales del siglo XIX.
Desde la primera edición de la Liga Escocesa allá por la campaña 1890-91, el Rangers, que fue el primer vencedor de la competición, ha sido tradicionalmente el dominador del torneo local. Si bien es cierto que el Celtic fue el cuadro más ganador durante las primeras tres décadas (concluyó 1919 con 15 entorchados por los 9 del cuadro protestante), el Rangers revirtió la situación por completo en los años 20.
Por aquel entonces, los 'Gers' enlazaron un título tras otro, ganando desde 1920 un total de 13 de los 16 siguientes campeonatos, dejando al Celtic saborear la gloria tan solo en un par de ocasiones (con el Motherwell pescanso una inesperada corona). Revisando la historia, al final del curso 1927-28, el Celtic sumaba un cetro más que el Rangers (17-16), siendo igualado en la campaña 1928-29 (17-17).
Desde entonces, el Rangers siempre estuvo por delante en un palmarés en el que logró obtener una ventaja superior a los 10 entorchados (34-20 en 1964). Pese a ello, una racha de 9 títulos consecutivos en la mejor etapa histórica de los católicos recortó la diferencia a solo cinco (34-29 en 1974), quedando la misma reducida a tres en 1988 (38 a 35).
Sin embargo, con la llegada de los años 90, el Rangers volvió a ser el conjunto más dominador del fútbol escocés, cosechando múltiples títulos ligueros para expandir su ventaja de nuevo por encima de la decena antes de la llega del nuevo siglo y manteniendo en la primera década del mismo una diferencia que, por momentos, parecía insalvable para el Celtic.
A finales de 2011, el Rangers dominaba con claridad el palmarés de la Liga Escocesa. Sumaba 54 entorchados por 43 del Celtic, manteniendo con facilidad esa ventaja obtenida entre finales de los 80 y mediados de los 90, cuando consiguieron enlazar hasta 9 campeonatos de manera consecutiva. Sin embargo la situación financiera comenzaba a ser un serio problema para un club que en 2012, tras finalizar el curso en la segunda posición, sufrió una hecatombe.
El Rangers, asfixiado por las deudas, desapareció y tuvo que ser refundado. Jugando en el mismo estadio, con los mismos colores y los mismos símbolos que antes, la entidad pidió entrar directamente en la máxima categoría del fútbol escocés, pero la negativa de la mayoría de conjuntos del campeonato le obligó a comenzar su andadura como The Rangers Football Club desde la cuarta división.
Sin su gran rival en el horizonte a corto y medio plazo, el Celtic vio ante sí una oportunidad de oro para recortar distancias. Y no la desaprovechó. Los católicos de Glasgow sumaron al hilo 9 coronas (desde la temporada 2011-12 hasta la 2019-20), situándose a tan solo tres de un Rangers que regresó en pocos años a la zona alta de la Liga Escocesa, pero sin poder competir primero y luego superar a sus vecinos, cuyo nivel acostumbra a ser superior desde ese año 2012.
El campeonato cosechado en la temporada 2020-21 fue una maravillosa excepción que impidió al Celtic enlazar hasta 13 ligas seguidas, pues los verdes lograron imponerse posteriormente en los cursos 2021-22, 2022-23 y 2023-24 para situarse a tan solo un título de distancia: 54 a 55. Una mínima diferencia que ahora, tras casi un siglo, desaparece.
Con la conquista de su 55ª Liga Escocesa, el Celtic se distancia además en el historial de grandes títulos nacionales. Si el balance de Ligas es ya absolutamente parejo, el global, en el que se encuadran también Copas Escocesas y la Copa de la Liga de Escocia, es prácticamente idéntico, demostrando el repartido dominio de estos dos conjuntos en el balompié de su país.
El Celtic, con este último entorchado, suma ya en su palmarés 55 Ligas, 42 Copas y 22 Copas de la Liga, acumulando un total de 119 conquistas dentro de sus fronteras. Además, los católicos podrían llegar a los 120 si logran imponerse en la presente edición de la Copa, logrando así un nuevo triplete a nivel nacional.
Por su lado, pese a que el incremento casi constante de su número de trofeos ha disminuido ostensiblemente en la última década, el Rangers, en todas sus variantes y nominaciones, puede presumir de contar con 55 Ligas, 34 Copas y 28 Copas de la Liga. Es decir, 117 títulos, únicamente dos menos que el Celtic pese a todos los problemas sufridos y las consecuencias de los mismos.
Eso sí, en el plano internacional, salvo un terremoto en un mundo del fútbol que no volvió a ser el mismo desde la Ley Bosman, la rivalidad parece que siempre quedará decantada a favor del Celtic. Bien es cierto que el Rangers cuenta en su palmarés con una Recopa de Europa (1971-72) y recientemente ha tenido mejor desempeño internacional que sus vecinos (fue finalista de la Europa League en los cursos 2007-08 y 2021-22), pero nada pesa tanto como aquella Copa de Europa del curso 1966-67 que sigue permitiendo presumir al Celtic casi seis décadas después de ser el único equipo escocés que fue rey del Viejo Continente.