Che Adams firmó, en el partido de su Southampton frente al Sheffield United, el probable golazo de la jornada. De volea, firmó las tablas cuando más lo necesitaba su equipo con un golpeo seco a un balón que le llegó botando en al frontal del área tras una dejada de Armstrong.
Estaban los 'saints' asediando la portería de Ramsdale cuando la defensa logró alejar el esférico al fin. La intentona por salir de atrás no salió bien y el cuero fue interceptado, lo que facilitó que cayera llovido a Armstrong, listo y rápido para servirlo de pecho a Adams.
Este, sin pensárselo dos veces, levantó la cabeza, detectó que tenía por delante una gran oportunidad de marcar y, con la pierna derecha, envió el esférico al fondo de las mallas por toda la escuadra. Calculó los tiempos a la perfección y nada pudo hacer el guardameta contrario.
La diana, además, tuvo lugar poco después de arrancar la segunda mitad, en un tramo importantísimo para encarrilar la recta final del enfrentamiento con garantías de remontada. Con efectivos como él en el campo, el Sheffield United no puede permitirse fallar.