Tras abandonar el Granada el pasado verano, Flores puso rumbo a la ciudad rusa, donde no terminó de afianzarse y solo disputó ocho encuentros de la Liga Rusa.
A sus 31 años, el defensa afronta unas semanas claves para poder encontrar un asilo para lo que queda de curso, u opta por entrenarse en solitario de cara ya a la próxima temporada.
En España tiene un buen cartel, sobre todo por su veteranía y experiencia. Chico ha disputado campeonatos de hasta cinco países y, en España, ha militado en las filas de Cádiz, Mallorca, Almería, Barça B y Granada.
15 de febrero de 2019