Puro carisma neozelandés

Está de moda aquello del carisma. Del aura. Las redes sociales están impregnadas de vídeos inferiores al minuto de duración con acciones de descaro, valentía o autoridad por parte de los futbolistas favoritos del gran público. La viralidad de este contenido tiende a opacar un poco a tipos de enorme mérito que quizá no cuentan con tanto calor por parte de los focos, pero sí mimbres de sobra para hacerlo pronto.
Chris Wood es un caso claro. El veterano delantero del Nottingham Forest mide 1,91 y, aunque tiene 32 años, lleva rindiendo notablemente desde los 25, cuando registró su mayor marca de goles en una misma temporada, 30 con el Leeds United en el Championship de la 16-17. Es por ello que el Burnley pagó 16.4 millones de euros a los 'whites' para ascenderle a la Premier League y que, más adelante, el Newcastle United abonó 30 para vestirle de blanco y negro.
Solo el Saint James' Park frenó su progresión. La solución se presentó en fórmula de cesión a los 'tricky trees', que exprimieron su mejor versión de nuevo y se hicieron con él a título definitivo desembolsando 17 'kilos' en el nido financiero de las 'urracas'. Esta apuesta se sustentó en un aporte de 15 tantos a lo largo de 35 enfrentamientos de la pasada campaña y, en la actual, ya lleva 4 en 7. Está en la carrera por la 'Golden Boot' que tiranizó, tiraniza y tiranizará Erling Haaland.
Antes del parón internacional, Wood recibió la llamada de la Selección de Nueva Zelanda con una sonrisa de oreja a oreja. Le acababa de marcar al remozado Chelsea de Enzo Maresca para defender la 10ª posición de los suyos en la élite británica. Esta tierra de nadie, insuficiente para muchos, es genial para los de rojo y blanco, que superan, de momento, a proyectos de mayor calado pecuniario como el West Ham United -12º- o el Manchester United -14º-.
El protagonista de estos párrafos, enfundado con sus vestiduras patrias, mantuvo su estelar rendimiento con goles frente a Tahití en la fase de clasificación para el Mundial de 2026 por Oceanía, que acaba de arrancar, y Malasia en una cita amistosa en la que descansó del once titular, pero batió al portero rival a los 10 minutos de que su entrenador le diera entrada para los compases finales. Próxima estación: Crystal Palace. No hay 'eagle' que no vaya a temer su mirilla cuando sobrevuele las Midlands del Este.
October 14, 2024