El Real Madrid barrió al Chelsea en Stamford Bridge tanto en lo táctico como en lo físico. Ancelotti le ganó a Tuchel en la pizarra en uno de los mejores partidos de los blancos de esta temporada. La titularidad de Valverde mejoró al equipo del Bernabéu.
La superioridad ya se vio desde los primeros minutos, cuando las conexiones entre Vinicius y Benzema empezaron a fructiferar. El brasileño fue un completo dolor de muelas para Christensen, que no tuvo el apoyo de James por la derecha.
En el primer gol, el brasileño ya le comió la tostada muy fácilmente y acabó en el centro del primero de su socio Karim. También falló el danés en el 0-2, cuando entre él y Thiago Silva generaron el hueco necesario para que el '9' cabeceara a la red.
Una pobre actuación del zaguero que fue vista desde la Ciudad Condal, ya que el Barça lo tiene casi todo atado para su fichaje en junio. Su contrato acaba esta temporada y su futuro pasa por el equipo que entrena Xavi.
No obstante, su partido generó dudas, sobre todo en esos uno con uno que pocas veces le ganó al joven extremo del Madrid. Sus puntos fuertes son la colocación y salidad de balón, pero lo tendrá difícil para sentar a un consagrado Piqué, Araujo o Eric García..