El duelo de hace unas semanas entre Arsenal y Crystal Palace en el Emirates Stadium estuvo marcado por el lance de Xhaka con los aficionados 'gunners'.
El internacional suizo insultó a sus propia afición después de que esta le abucheara y celebrara su cambio. Ahora, en frío, el jugador ha explicado lo que sintió.
"Cuando mi dorsal apareció en la tablilla del cuarto árbitro y nuestros propios seguidores se sintieron felices... Fue un momento muy duro y me molestó", comentó en el periódico suizo 'Blick'.
"No pude entender esa reacción de insultar y abuchear a tu propio capitán. Eso genera un mal ambiente. No uvo sentido", añadió Xhaka.
Sin embargo, el jugador está tratando de olvidar todo lo sucedido. "Continuaré siendo positivo, dando lo mejor de mí mismo y demostrando que soy una parte importante de este gran equipo", sentenció.