Nada que perder, todo por ganar. Así viajó Temperley a rendir visita a Argentinos Juniors para su enfrentamiento en los octavos de final de la Copa Argentina.
La competición copera servirá de estímulo para un conjunto que acumula dos derrotas consecutivas en el arranque del Nacional B, aunque un triunfo ante un rival del calibre de Argentinos haría olvidar todos los males.
"El partido puede ser un punto de inicio para nosotros. La idea es hacerle un planteo de igual, con juego, agresividad y tratar de hacer las cosas bien para comenzar con los buenos resultados", comentó el futbolista Nicolás Demartini.
Desde el club tienen claro que el plantel de Argentinos es muy superior, pero aún así muestran gran confianza en lograr un triunfo que les devuelva por el buen camino perdido en la competición liguera.
"No fue el arranque que esperábamos, sabíamos que era duro el torneo ya que no hay partidos fáciles en esta categoría. Estamos tratando de mejorar los errores y sacar a flote esos detalles que en el Nacional te cuestan un partido", concluyó el jugador, que tiene la ilusión intacta y espera lograr una victoria que acerque a su equipo un paso más a la gloria.