"Sentía que no era yo, que no disfrutaba de las cosas, que la gente que me rodeaba estaba de más. No tenía sentimientos y llegó un momento en el que no podía más. Tuve suerte de que hubiera gente para ayudarme", afirmó el centrocampista.
Pese a lo difícil del momento, el ex del Barça contó que gracias a todo lo sucedido comenzó a apreciar más cualquier cosa: "Estoy feliz de haber vivido esa situación, de haber salido porque me ha hecho mejor persona. A partir de ahí valoras todo, eliges las cosas importantes a las que no dabas valor".
"Con la vida que tenía, con el triplete y el gol de Stamford Bridge, era incomprensible que no me encontrara bien, pero son cosas que suceden. A mitad de un entrenamiento empezaba a encontrarme mal y tenía que irme. Lo importante es que no perdí la ilusión".
Además de este episodio, Iniesta repasó varios temas más, como su nuevo futuro en Japón: "No me da vértigo ir. Me apetece, también a nivel familiar y también para crecer como persona y enriquecerme culturalmente. Creo que es algo muy positivo para mi futuro".