En la sala de prensa del estadio sevillista, el técnico del cuadro luxemburgués indicó que "había una diferencia de nivel y técnica entre los dos equipos" y se ha visto sobre el campo a pesar de que sus pupilos demostraron "valentía y cierta organización".
Destacó que su equipo mantuvo la portería a cero en el primer tiempo y después fue diferente "al encajar ese gol" al comienzo del segundo, pero felicitó a sus jugadores "por su rendimiento ante un gran equipo como el Sevilla, muy bueno, que, pese a rotar respecto a LaLiga, tiene una gran plantilla que puede marcar la diferencia".
"A pesar de la derrota, soy positivo y optimista y tengo que felicitar a mis jugadores, pero la diferencia era muy grande", recalcó el preparador belga del Dudelange.
El conjunto luxemburgués, con tres puntos, es tercero del grupo que lidera con nueve el Sevilla, a uno solo del Qarabag azerbaiyano, segundo con cuatro tras empatar en su casa contra el APOEL chipriota (2-2), colista con 1uno.
"Incluso con esta derrota no está todo perdido. Nuestro objetivo es aprender, vivir una gran experiencia, no la clasificación, que sería un éxito rotundo, pero somos realistas. De los tres partidos que quedan, jugamos dos en casa, van a ser muy difíciles, pero en el fútbol nunca se sabe y por qué no nos vamos a clasificar", dijo.