El 'Glorioso' es Luis Rioja y el Ibiza muere en la orilla

Esto es fútbol profesional, no unos tiros en la playa. El colista demostró con creces que puede pasar cualquier cosa mientras el balón esté sobre el césped y el árbitro permita jugar. No es fácil ver cómo un candidato al ascenso te marca tres goles en menos de 40 minutos y mucho menos recortar distancias para, finalmente, morir en la orilla. Pues así fue... hasta que se quedó con nueve.

El Alavés le ganó al Ibiza (4-2) el partido que amargó la siesta correspondiente a la jornada 28 en Segunda División. Y menos mal que no se pudo conciliar el sueño, porque menuda montaña rusa de emociones presenció Mendizorroza en pleno Carnaval. Primero fue la demostración de que el verdadero 'Glorioso' es Luis Rioja, después llegó el amago de épica de los baleares que frenó Xeber Alkain.

Lo que tú digas, Luis Rioja

Héroe, capitán y, en definitiva, líder. Todo ello fue el '11' local en una primera mitad de ensueño. Tardó diez minutos de reloj en recibir el contragolpe de Toni Moya para cruzar a Fuzato. 1-0. La picardía le hizo ampliar distancias en el marcador con una falta directa, fruto del error en la barrera naranja. 2-0. Y desde el punto de penalti hizo el 3-0, pero Pape Diop quiso darle intriga al encuentro con un zapatazo estratosférico desde Senegal. 3-1 al descanso.

Lucas Alcaraz no se lo pensó dos veces tras la reanudación: cuatro cambios de una pegada. A partir de aquí, el Ibiza fue un equipo digno de luchar por la permanencia: mejor posicionado, con más balón y la fe de poder combatir hasta el final. Ekain aprovechó la negativa del Alavés provocando una pena máxima con Sedlar haciendo de víctima. El '10' engañó a la perfección a Sivera y el miedo invadió al respetable blanquiazul. 3-2.

El efecto revulsivo marcó la diferencia

Luis García tomó cartas en el asunto y dos sustituciones marcaron la diferencia: Mamadou Sylla y Xeber Alkain. Los anfitriones no se echaron atrás y la insistencia provocó las expulsiones de Fausto Grillo y Marcos Mauro. Dos tarjetas rojas cortaron de una tajada las dudas en el ambiente. Aquí es donde tienes que retroceder algunas palabras, porque el primer revulsivo puso el balón en bandeja para el gol y el segundo mencionado firmó la sentencia. 4-2.

No fue el mejor partido del Alavés. Sin embargo, sumó la quinta victoria consecutiva, garantizó terminar la jornada en plaza de ascenso directo a Primera División y se demostró que el verdadero 'Glorioso' es Luis Rioja. Pero que la derrota no tape lo que hizo el Ibiza en Mendizorroza. Respetos para un equipo que, mientras las matemáticas lo permitan, seguirá dando guerra para sobrevivir y evitar el descenso a Primera Federación.