Un golpe definitivo

El Almería sumó una victoria tan necesaria como sufrida ante el Cartagena, el colista de LaLiga Hypermotion que certificó matemáticamente el descenso de categoría, algo que desde hace ya bastantes jornadas era prácticamente una certeza.
El equipo indálico, que lucha por regresar a la élite del fútbol español, se las prometía muy felices cuando se adelantó en el marcador a los ocho minutos con una diana del brasileño Léo Baptistao y más cuando el colombiano Luis Suárez amplió la renta al inicio de la segunda mitad, pero un penalti convirtió el final casi en una pesadilla para los locales, que estuvieron a punto de entregar incluso el triunfo.
El Almería comenzó con una intensidad notable. Tomó el control, se lanzó al ataque y aprovechó la debilidad del colista. Las oportunidades no tardaron en llegar y el gol tampoco, cuando un centro preciso de Centelles encontró a Baptistao, quien inauguró el marcador.
El conjunto andaluz siguió dominando con una presión alta y un manejo efectivo del balón, mientras el Cartagena apenas lograba salir de su área y sobrevivía en el partido gracias a la carencia de precisión en la definición en las llegadas locales.
Para su fortuna la encontró con el de casi siempre, el colombiano Luis Suárez, al inicio del segundo tiempo, pero la tranquilidad del Almería se vio amenazada en los minutos finales.
Una acción de Lucas Robertone al borde del área terminó en penalti para el Cartagena. Millán lo transformó y lo que parecía un cómodo triunfo rojiblanco se tornó en un final lleno de tensión, pasando de un monólogo de dominio a un desenlace que rozó el drama porque un remate de Luna se estrelló en el larguero, en un ejercicio de orgullo del bloque murciano el día que certificaba su adiós a la categoría de plata.