Argelia y Guinea Ecuatorial se citaron en el Stade de Japoma con el objetivo de aprovechar el empate entre Costa de Marfil y Sierra Leona para llevarse los tres puntos y así colocarse en segunda posición.
Desde los primeros instantes, ambos equipos plasmaron con claridad su idea de juego sobre el campo. Mientras que los 'Zorros' mantenían la práctica totalidad de la posesión del balón, el equipo de Juan Micha.
Pero si por algo se caracterizaron los primeros compases del juego, fue por la excesiva dureza. En menos de diez minutos se vieron tres tarjetas amarillas, todas ellas por acciones temerarias en las que Bounedjah, Bensebaini y Ndong fueron pasados de revoluciones.
Alrededor del minuto 20, Siafa tuvo una buena ocasión con un disparo que atajó M'bolhi. La respuesta llegó en botas de Mahrez, que comenzó con las diabluras. Recortó a un defensa hasta en dos ocasiones, dejó el balón atrás, pero el remate posterior de un compañero fue detenido con solvencia por Owono. Sin embargo, pocos destellos más se le vieron en el partido al talentoso jugador del City.
Los minutos fueron pasando y ambos equipos se mantenían tranquilos en sus respectivas posturas. En los últimos minutos, Guinea Ecuatorial tuvo dos muy claras, una falta de Pablo Ganet que casi termina en gol y un disparo de Ibán Salvador al primer toque que salió rozando la escuadra.
La segunda mitad, para sorpresa de nadie, comenzó donde se había dejado la primera. Argelia mantenía la posesión del cuero, aunque de una forma bastante estéril. Esteban Orozco evitó el gol de Bounedjah despejando un cabezazo prácticamente sobre la línea.
El propio central del Antequera volvió a resultar decisivo, aunque esta vez en la portería rival. Josete prolongó en el primer palo un centro raso desde la esquina, al cual llegó completamente solo Orozco para poner a placer el 0-1.
A partir de aquí, el equipo de Djamel Belmadi intentó empatar, aunque con más corazón que cabeza. El propio Orozco volvió a demostrar en el 86' que fue por méritos propios el hombre del partido. En esta ocasión, mandó a saque de esquina un pase de la muerte que llegaba envenenado desde la derecha.
A la postre, derrota de Argelia que tiene doble sabor amargo: por un lado, se queda con el agua al cuello y lo tendrá realmente complicado para clasificarse en la última jornada. Por otra, corta una racha de 35 partidos seguidos sin perder, quedándose a tan solo dos de la Selección Italiana. Los guineanos llegarán a la última fecha dependiendo de sí mismos.