Empate ninja en Bélgica

La Selección Española Sub 21 puede estar tranquila hasta marzo. En su último partido de este parón internacional, empató 1-1 contra Bélgica en Lovaina. Las tablas fueron ninjas: se parapetaron en el momento de los goles. La señal local se perdió cuando el marcador pasó de estar seco a acoger el par de goles con los que se resolvió, así que las televisiones de los dos países inmiscuidos sufrieron una especie de 'black out'.

El desbarajuste no priva a los aficionados de saber cómo fueron los tantos. El primero nació de un penalti de Diego López. El '7' ya había cometido una falta, anteriormente, al cargar con demasiada contundencia sobre un rival. Repitió la operación en una contra en la que Hugo Siquet se disponía a poner un centro desde un costado del área de Pablo Cuñat. Le derribó desde atrás y, aunque hay motivos para pensar que la pena máxima es rigurosa, también para imaginar que el árbitro entendió que estaba privando a los 'Diablos Rojos' de una gran ocasión.

3 minutos después, Samu Omorodion devolvió la igualdad al luminoso con un zurdazo cruzado que dejó sin opciones a Vandevoordt. El cedido en el Alavés por el Atlético de Madrid sigue dando motivos para la ilusión. Después de más de tres cuartos de encuentro en los que Carlos Martín apenas se dejó ver y, cuando lo hizo, no funcionó para sortear a la zaga contraria, él apañó el problema que se encontró de sopetón a los 7' de entrar al campo.

Santi Denia habría respirado tranquilo de haber llegado esta diana antes, pues los suyos eran los que más lo estaban mereciendo. Con el sello de la casa, el de la posesión, sus pupilos tomaron el mando del partido desde los primeros compases e impusieron el ritmo que entendieron como más conveniente. Lo aceleraron cuando se notaron superiores y lo deceleraron cuando Bélgica amagaba con alocarlo para aprovecharse de alguna contra.

El principal escollo de 'la Rojita', como ocurre en prácticamente cada categoria de la Selección, estaba en la sensación de que, por mucho que sus jugadores amasaran la pelota, el contrincante podía dar un bocado fatal en algún ataque veloz. Este temor se hizo evidente con un error de Rafa Marín en la salida de pelota, cuando regaló el balón a un adversario y tuvo que correr para ver, desde detrás, cómo Malick Fofana mareaba a Álvaro Carreras antes de mandar el cuero fuera con un golpe potente en la mejor ocasión para los anfitriones de todo el encuentro.

El central de España volvió a exponer alguna carencia en el entendimiento con sus compañeros más adelante, cuando se dejó llevar hacia tres cuartos de campo para apoyar en una trenza de pases en la que se equivocó. Lento al asociarse con alguien, cedió ante los defensas que le salieron al paso sin oponer demasiada resistencia. De todas formas, esto sucedió a unas alturas del verde en que no suponía peligro para Cuñat.

La Sub 21 conoció a sus mejores hombres, con permiso de Omorodion, en el centro del campo, donde Fermín se vio especialmente activo. Generó varias oportunidades, cayó a banda -la izquierda fue una autopista para el equipo visitante en la primera mitad-, se desmarcó para rematar algún córner y aprovechó bien que Pablo Barrios y Beñat Turrientes se habían responsabilizado un poco más de hacer fluida la red de envíos de la medular.

Assane Diao también destelló desde la diestra con alguna internada cruzada hacia la frontal, pero no terminó de encontrar ese clásico tiro que busca el palo largo o intenta sorprender por el corto. En líneas generales, de todos modos, cualquier prestación de los de Santi Denia era suficiente para mejorar la de los belgas porque estos se aferraron a los contragolpes y al físico sin llegar nunca a dominar a pesar de asustar.

La Selección puede celebrar este empate porque sirve para mantenerla en el primer puesto de su grupo en la fase de clasificación para la Eurocopa con 3 puntos de ventaja sobre los 'Diablos Rojos' y Escocia, que firmó la paz con Hungría a la misma hora que el choque de Lovaina. La próxima estación es marzo, un mes en el que la afición estará ya pensando en el final de las temporadas de las grandes ligas y en la previa de la Eurocopa sénior.