La Supercopa de Argentina, que ya de por sí estaba algo empañada por celebrarse en Abu Dhabi, ha contado con más polémica en el cierre del partido que definía el título. Una mano totalmente involuntaria de Sández le dio la victoria a Racing desde los once metros allá por el minuto 95.
Fue menos dramático el partido que el del Trofeo de Campeones, con diez expulsados de por medio. El más afectado, Boca Juniors por un final de partido que puede dejar tocada a la plantilla del 'Xeneize'.
Boca se presentó sin Agustín Rossi y con el veterano Javi García, que acabó con serias ocasiones de peligro de Racing. Comenzó mejor el cuadro de Hugo Ibarra, pero los de Avellaneda tuvieron las ideas más claras desde el principio, con un juego más directo.
Para más inri, el 'Xeneize' se puso en ventaja con un misil fantástico dentro del área de Roncaglia, aprovechando un rechace en un saque de esquina. Sin embargo, la respuesta de Racing fue inmediata para el 1-1.
Solo tres minutos después, en el 20' de juego, Carbonero finiquitó una contra de '10' iniciada por Moralez, a la espalda de la defensa de Boca Juniors. El delantero colombiano de 23 años fue el mejor del partido, estuvo en todas partes y solo le faltó hacer el segundo de los suyos.
El partido se igualó bastante. Solo antes del descanso estuvo a punto de marcar Carbonero de nuevo, pero Javi García le negó esa suerte. En el segundo tiempo, Benedetto dispuso de una buena opción en el 65', asistido por Pol Fernández desde la línea de fondo.
Racing también llegó mejor a los últimos minutos de tiempo reglamentario, aunque el ambiente era de prórroga. Carbonero perdonó tras regatear a Javo García y Sández cabeceó desviado en la ocasión más seria de Boca antes de entrar en el tiempo de añadido.
La polémica llegó en el minuto 93, cuando aparecieron varios rebotes dentro del área 'xeneize' y el balón tocó en el brazo de Sández. Venía de rechaces, pero el colegiado Fernando Rapallini lo tuvo claro: penalti y gol de Piovi para el 1-2 definitivo que encumbra a Racing en Abu Dhabi.