Ferran y Lamine apagan el infierno de Dortmund

El Barcelona sufre en los últimos partidos. Mucho, más de lo deseado. Ha pasado de ser el equipo más sólido de Europa a necesitar 3 o más goles para sacar un resultado positivo. Y así tuvo que hacerlo en Dortmund. Pero hubo final feliz, los de Flick resistieron y están a un paso de los octavos.
En un infierno amarillo, ante una afición totalmente volcada con su equipo y a las puertas de los octavos de final de la Champions League, entre Ferran y Lamine Yamal apagaron el fuego alemán.
Pocos esperaban un doblete de Ferran Torres en un partido de Champions. Menos en un escenario tan imponente como el Signal Iduna Park. Pero el internacional español, que salió como suplente con el 1-1, fue el encargado de dar tres cuartos del pase a octavos a los azulgranas.
El Borussia Dortmund ha hecho del Signal Iduna Park un infierno. Bien lo saben todos sus rivales. Alguno, de hecho, ha salido acongojado cuando entra de los vestuarios. Y es que los germanos llevaban desde 2021 sin perder un solo encuentro en casa en la Champions... hasta que ha llegado el Barcelona.
Deja el partido en color azulgrana un gusto dulce, pero también un regusto amargo, de preocupación, de tener que dar varios golpes para acabar con los rivales. Dominó más durante la primera mitad, pero tuvo más colmillo en la segunda, cuando las piernas dejaron de funcionar para todos los mortales.
Como suele ser costumbre, el Barcelona tiró la línea del fuera de juego en el centro del campo y se llevó más de un disgusto. Eso sí, antes dominó el partido como quiso, con la posesión o sin ella, con Lamine Yamal o sin él. Y con Pedri, quien apareció en los momentos clave. Primero, para regalar una gran asistencia a un Raphinha que definió a la perfección ante la atónita mirada de los defensas germanos, que levantaban la mano reclamando el fuera de juego.
Al Barcelona le da igual el resultado, siempre va a correr riesgos en defensa. Y en el infierno de Dortmund se acabó quemando en dos ocasiones. Primero, con un Cubarsí que hizo un penalti infantil, un empujón a Guirassy que vio el linier de Letexier y que el propio delantero se encargaría de materializar. Después, tirando mal la línea del fuera de juego y permitiendo a Gross regalarle el tanto a su delantero, que se marchó con un doblete y con la sensación de haber desperdiciado todo su cartucho.
Entre tanto, y con el 1-1, Flick hizo un triple cambio sorprendente, como si el encuentro de Dortmund apenas contase, y quitó de un plumazo a Dani Olmo, Raphinha y Lewandowski. De repente, Ferran era el '9' del Barça, un Ferran criticado pero que si algo tiene es un romance con el gol.
En su tercer partido marcando de forma consecutiva, el ex del Valencia apareció donde tenía que aparecer, en el área chica en un rechace, para poner el 1-2 provisional. Con el 2-2 tampoco se rindió, y es que combinó con un espectacular Lamine Yamal para marcar el gol de la victoria.
Y es que hay que hablar de ese adolescente que solo lo es en el carné de identidad. Qué jugador es Lamine, capaz de contemporizar las jugadas para dejar solo a sus compañeros. De sus botas nació el 1-2 y de sus botas llegó el 1-3. A veces, como esta noche, jugar con un futbolista así es trampa. Pero bendita trampa la del Barcelona.