El Celta-Real Sociedad tuvo un protagonista inesperado en los primeros minutos: los servicios médicos. El partido comenzó con un choque de cabezas entre Aihen y Hugo Mallo.
El de la Real se llevó unas grapas y un vendaje del recuerdo. Al del Celta también tuvieron que taparle la herida en la cabeza.
En varias ocasiones tuvo que pararse el choque porque Aihen no paraba de sangrar. Y, con tanto detenimiento, las ocasiones tardaron en llegar.
Aihen, finalmente, no pudo seguir, aunque no por ese golpe. En otro lance de juego sintió un dolor en el adductor que le hizo tener que retirarse. Imanol puso a Rico en su lugar.
Y, tras eso, llegó el gol 'txuri urdin'. Illarra recibió en la frontal, controló y con un zurdazo de infarto, la cruzó y batió a Marchesín.
Pero el Celta no lo había dicho todo, ni mucho menos. En el 40', Zubimendi quiso retrasar el balón, pero por allí merodeaba Iago Aspas, el más listo de la clase. Metió la bota, se hizo con el esférico y la puso al palo corto para hacer el 1-1.
Tras el descanso, la Real volvió a ponerse por encima. La pizarra de Imanol dio sus frutos y terminó con un 1-2 a favor de los visitantes.
Brais Méndez sacó de esquina y le puso el centro perfecto a Zubeldia. Este se libró de toda marca y, de cabeza, puso a los suyos por delante en el marcador.
Iago Aspas tuvo alguna ocasión más, pero no estuvo acertado. Carles Pérez, en el 76' tuvo otra clarísima. Se perfiló, le pegó y obligó a Remiro a meter la mano. Un misil que pudo detener el conjunto 'txurri-urdin'.
Con este triunfo, la Real sube al cuarto puesto con 19 unidades, los mismos puntos que tiene el Atlético. El Celta, por su parte, se queda undécimo con 10 puntos.