La hinchada del Celta cumplió con creces y hubo ambientazo en el último encuentro del curso. Balaídos disfrutó del choque, consciente de que habrá unos meses de parón, por lo que los fans se dejaron la garganta.
El Valencia salió a morder y los de Baraja encontraron pronto el premio. En el 5', Thierry dejó a todos sin habla tras un auténtico jugadón. Hizo una ruleta, se metió en el área, se quitó de encima a Kevin y centró. Iba a rematar André Almeida para abrir la lata, pero no le hizo falta. El esférico tocó lo justo en Carlos Domínguez y terminó con un autogol del celtiña.
Poco después, intentó Thierry repetir la jugada, pero esta vez estuvo más lista la zaga 'che' y consiguió despejar el peligro.
El Celta, por su parte, no bajó los brazos. Pudo empatar, de hecho, en el 33', por medio de Iago Aspas, que chutó a bocajarro en boca de gol, pero su tiro fue a estamparse contra el palo.
El encuentro se fue al descanso con el Valencia ganando por 0-1. Tras volver de los vestuarios, el equipo de Giráldez se puso las pilas y provocó un penalti.
Locura en Balaídos
Swedberg se llevó el balón, Mosquera trató de evitarlo, pero el celtiña le ganó la partida, lo que obligó al 'che' a meter la pierna por detrás para evitar que se le fuera. Lo vio claramente el colegiado y pitó pena máxima.
Iago Aspas, desde los 11 metros, con la zurda, batió a Mamardashvili, que llegó a tocar la bola con la punta de los dedos, pero no pudo evitar que el esférico terminara en el fondo de sus mallas.
Poco iba a durarle la alegría al Celta. En el 60', se giraron las tornas y fue Fran Beltrán quien cometió penalti tras darle una patada por detrás a Marí, que fue el encargado de poner otra vez al Valencia por delante en el marcador (1-2).
Encajó con entereza el nuevo golpe el conjunto de Giráldez y apenas 2 minutos después, Douvikas devolvió las tablas al luminoso. Tras un gran pase de Iago Aspas, se inventó un tiro cruzado después de dejar atrás a Mosquera.
Giráldez tuvo que cambiar a Iago Aspas que, tras un lance de juego con Pepelu, se fue al suelo y pidió rápidamente el cambio al míster, que hizo entrar a Dotor en su puesto para el último cuarto de hora. Baraja, por su parte, perdió a Thierry, que se fue cojeando y se vio obligado a tirar de Iranzo en los últimos compases.
Con este resultado, el Celta acaba en el 13º puesto con 41 puntos. El Valencia, por su parte, concluye noveno con 49. Ambos conjuntos tendrán un merecido descanso y, posteriormente, tendrán que centrarse ya en el próximo curso, en el que esperan aspirar a objetivos más ambiciosos.