El genio de los tres deseos

Es más que evidente que la versión de James Rodríguez del 2014 ha vuelto para quedarse. En la Copa América sobresalió por encima del resto y se llevó un 'MVP' merecido, aunque se quedó con la 'espinita' de no haber podido levantar el título con su Selección. Al menos, el de Cúcuta pudo vengarse de Argentina, verdugo de su Selección hace prácticamente dos meses.
Barranquilla mostró sus mejores galas para la puesta en escena del '10', un genio que cumplió tres deseos. El primero fue para Yerson Mosquera, al que le puso un caramelo en el área para abrir el marcador. El segundo fue para Nico González, que recibió una entrega del jugador del Rayo Vallecano para empatar la contienda. Y el tercero fue para todos sus compatriotas, siendo él mismo el encargado de tirar el penalti que dio el triunfo a la 'Tricolor'.
Los primeros compases del encuentro dejaron mucho que desear. Tanto Colombia como Argentina estuvieron muy timoratos a la hora de acercarse a la portería contraria. Ambas selecciones no generaron ningún peligro real hasta que Julián Álvarez, a los 12 minutos, le robó la cartera a Camilo Vargas. El portero, que previamente había tenido un lance con la 'Araña', se durmió y casi le costó un disgusto a su Selección. Afortunadamente, el jugador del City, sin ángulo, no acertó en su disparo y la pelota pasó cerca del palo izquierdo.
Poco a poco, la 'Tricolor' intentó mostrar su superioridad en el centro del campo, aunque la 'Albiceleste' se lo impidió durante varios minutos. Lo más reseñable fue una acción de toque de los pupilos de Scaloni que acabó con un remate muy arriba de De Paul, que pidió saque de esquina sin éxito alguno.
El único tiro a portería hasta el momento fue de Richard Ríos, algo que no supuso ningún problema al Dibu Martínez. Desde la grada se estaban empezando a impacientar y fue entonces cuando James, en el 25', filtró un buen balón a Luis Díaz, que vio cómo Otamendi le cortó su pase a Jhon Durán. El '10' empezó a mover ficha y tomó la responsabilidad en el córner.
El de Cúcuta sorprendió y sacó en corto a Jhon Arias, que no tardó en devolverle la pelota su compañero. El nuevo futbolista del Rayo Vallecano frotó la lámpara maravillosa y le concedió un deseo a Yerson Mosquera, que marcó a placer su primer gol en 4 partidos con el combinado 'cafetero'. Uno de los cabezazos más fáciles de su vida porque lo hizo a escasos centímetros de la línea de gol.
Argentina era consciente de que todavía quedaba mucho y más sabiendo la humedad y el calor que hacía en Barranquilla. Los de Scaloni apenas salieron a la presión y mantuvieron sus líneas para no dejar huecos a la 'Tricolor'. Lo más reseñable de la 'Albiceleste' fueron dos acciones casi seguidas en la recta final del primer acto. En la primera Mosquera evitó el tiro de Lisandro y en la segunda, Lautaro no acertó de volea.
Tras la reanudación, Argentina tardó 2 minutos en apagar la fiesta en el Metropolitano Roberto Meléndez. James, el mejor del partido, pasó a ser el villano de la película con una mala entrega a Nico González. El delantero de la Juventus aprovechó de paso la indecisión de Yerson Mosquera y se marchó en velocidad del defensor para batir por bajo a Camilo Vargas. La 'Albiceleste' encontró un premio casi sin quererlo y le dio un aviso a la 'Tricolor', que se repuso muy rápido del gol.
Poco después, una jugada de ataque del combinado local terminó con una caída en el área de Daniel Muñoz. El lateral, en plena labor ofensiva, tiró un recorte a Otamendi y el capitán arrastró la pierna derecha, lo que llevó a la caída del 'cafetero'. Piero Maza no señaló nada en un primer momento, pero recibió un aviso y fue a ver la acción en la pantalla. Tras unos minutos de duda, el trencilla indicó el punto fatídico.
Todo el mundo miró a James, que cogió el balón con decisión y lo colocó con mimo en el círculo central. El de Cúcuta tenía la oportunidad de redimirse del 1-1 y vaya sí lo hizo. Lanzamiento más que perfecto del '10', a la izquierda del Dibu Martínez. El jugador del Rayo desató la locura en la grada y se marcó un bailecito con sus compañeros para celebrarlo.
Scaloni sabía que debía mover ficha y metió a Alexis Mac Allister, que no estaba del todo en condiciones, y a Acuña. La 'Albiceleste' pasó a tener más la pelota y tuvo más llegadas sobre el área de Camilo Vargas, pero sin generar peligro. La más clara fue de Lautaro, que estuvo muy lento a la hora de resolver en el área. En los últimos 20 minutos prácticamente no hubo fútbol, ya que continuamente se interrumpía el juego. Colombia hizo sus artimañas para dejar que corriese el tiempo y le sirvió también para desquiciar a Argentina.
Ya sobre la bocina, Jhon Córdoba se quedó a las puertas del 3-1 por culpa del Dibu, que sacó un pie milagroso de la nada. En última instancia sacó bajo palos Acuña porque el cuero se colaba. Fue lo último de un encuentro que terminó con victoria de la 'Tricolor', que llevaba sin ganar a la 'Albiceleste' en Eliminatorias desde el 21 de noviembre de 2007. Casi 17 años ha tenido que pasar para que se volviese a repetir. Buena parte de la victoria es de James, que tiene una zurda que es poesía y que es patrimonio histórico del fútbol colombiano. Venganza realizada tras la derrota en la final de la Copa América.