La Copa mola... y este Barcelona más todavía. Arrasaron los 'culés' en Ceuta y ya están en cuartos de final del torneo del 'k.o.'. El equipo de Xavi Hernández vive un momento dulce y lo demostró con una aportación global de '10' que permite soñar con ver de nuevo mandar al rey de esta competición.
El 'Clásico' de la Supercopa y ese primer título de la 'era Xavi' en el banquillo azulgrana ha sido un punto de inflexión clave para el Barcelona, que terminó con dudas el 2022 y arrancó peor el 2023 en la victoria tan sufrida frente al Intercity, que le empató tres veces y le llevó a la prórroga.
Sin embargo, en el duelo vital ante el Atlético en el Metropolitano, los tres puntos volaron hacia la Ciudad Condal y, tras el susto en las semifinales de la Supercopa contra el Betis, la versión del pasado domingo, con un rival como el Real Madrid, fue de matrícula de honor. Así se forjan los campeones.
Lo de este jueves era un trámite. El Ceuta supuso un sorteo muy dulce para el Barcelona, como el propio Xavi reconoció en rueda de prensa. El cuadro de José Juan Romero es colista del Grupo I de la Primera RFEF y solo un ex barcelonista estuvo cerca de poner en un aprieto a su pasado club.
Hablamos del delantero Rodri, que estuvo en el filial del Barça allá por 2011. Un cabezazo suyo en un córner fue lo más peligroso del Ceuta en todo el encuentro. El marcador marchaba 0-0, en los peores momentos que atravesó el Barcelona en esta eliminatoria de octavos de final.
Porque lo cierto es que le costó al Barcelona entrar en el partido. El frío y los pocos espacios en el Municipal Alfonso Murube complicaron la posesión visitante frente a un Ceuta bien armado en su propio campo, sin dejar huecos e intentando contragolpear con velocidad.
Xavi apostó por Iñaki Peña en portería, Eric García en la zaga, Pablo Torre haciendo de Pedri en la sala de máquinas y Lewandowski como '9', aprovechando la Copa para competir por la sanción en Liga. El primer gol fue clave, y a partir de ahí, las ideas se aclararon para encarrilar el triunfo.
Raphinha se reivindicó en el minuto 41. Recibió un balón de Kessié cerca de la esquina del área, el brasileño recortó y buscó rápidamente un zurdazo inapelable al palo largo. Tocó el guardameta Mejías, pero no pudo evitar que se colara el 0-1 en la portería del Ceuta.
En el descanso entró Gavi por Pablo Torre. La respuesta para el segundo tanto fue inmediata: en el 50', robo de Kessié cerca del área y asistencia para el remate de primeras de Lewandowski, que no faltó a su cita con el gol.
Ya con el Ceuta roto, los cambios hicieron estragos. Ansu Fati sustituyó a Ferran Torres y firmó una jugada impresionante: se fue en diagonal hacia zona de peligro, amagó con dar el pase para Jordi Alba y acabó definiendo con mucha clase. 0-3.
Kessié, de cabeza, y Lewandowski (77' y 90') sellaron el billete 'culé' para los cuartos de final. El Barcelona ha cogido ritmo en este comienzo de año y amenaza con no bajarlo próximamente. El Camp Nou, contra el Getafe, próxima parada.