Un tanto del jugador croata del Hellas Verona Nikola Kalinic al final del encuentro ante el Bologna (2-1) acercó a su equipo a los puestos europeos, a dos puntos de distancia, a la espera de que se resuelva el resto de la vigesimotercera jornada de la Liga Italiana.
El ex jugador del Atlético de Madrid volvió a marcar después de salir de una lesión muscular que le obligó a perderse siete partidos oficiales del Verona. Reapareció saliendo desde el banquillo hace dos jornadas frente al Spezia, repitió suplencia ante la Salernitana y el Sassuolo y contra el Bologna fue decisivo.
Kalinic saltó al campo en el minuto 74 para sustituir al serbio Ivan Ilic y en once minutos se convirtió en el hombre decisivo del partido después de conectar un cabezazo perfecto ajustado a centro del francés Adrien Tameze que dio la victoria al Verona.
A falta de los tantos de Giovanni Simeone, peleado con el gol desde hace seis jornadas, el Verona, de momento, se mantiene en la pelea por Europa.
En esta ocasión, tuvo que remontar el tanto inicial de Riccardo Orsolini, que adelantó al Bologna a los catorce minutos con un golazo desde fuera del área. Entre Gianluca Caprari, antes del descanso, y Kalinic, voltearon el marcador, dejaron a su rival en tierra de nadie en el centro de la tabla y consiguieron mantener intactos sus sueños continentales.