El Madrid se encuentra un mastín y se asusta

Tenía que pasar en algún momento y el día ha llegado. El Madrid, que llevaba una racha inmaculada de 36 partidos sin perder entre todas las competiciones, se pegó su primer patinazo en mucho tiempo en Lille, donde el conjunto blanco se encontró a un mastín que defendió con uñas y dientes su recinto y su victoria.
Así es como se le conoce al equipo francés, que ejemplificó lo que es ese tipo de perro: grande, bravo y con un ladrido que da miedo a cualquiera. Habitualmente suele usarse para cuidar el ganado de cualquier tipo de depredador, que en este caso podía ser perfectamente el Madrid.
Los blancos eran conscientes de que debían llevarse todo del Pierre-Mauory, pero no lo lograron. El cuadro de Bruno Génésio supo muy bien asegurar su terreno y aprovechó el penalti que hizo Camavinga para protegerse y lograr el premio de los 3 puntos.
El conjunto de Ancelotti ofreció una imagen muy pobre, algo que lleva ofreciendo en los últimos tiempo, y sin ideas que es lo peor que no puede tener un equipo. Los de Concha Espina siguen echando de menos a Kroos y mostraron una clara dependencia de los hombres de arriba, que tuvieron una noche para olvidar. Endrick, en su primera titularidad, luchó y corrió por todos lados, pero falló la única que no podía errar. Vinicius lo intentó sin éxito y Bellingham tampoco aportó mucho en ataque. Y qué decir de Mbappé, que todavía no está al 100% tras salir muy rápido de una lesión muscular.
Desde el inicio, el Lille se mostró muy incisivo e intentó decirle al Madrid que le iba a tocar sudar si quería sacar algo positivo. El conjunto blanco contrarrestó los buenos minutos iniciales de los 'mastines' y fue Vinicius quien dio el primer aviso. El brasileño, a los 6 minutos, aprovechó una recuperación de Bellingham y enganchó un disparo que atrapó sin problemas el guardameta.
El siguiente en probar fortuna fue Bellingham, pero su remate se marchó muy por encima de la portería. No hubo ni una sola ocasión clara hasta el 19', momento en el que Endrick, quien estuvo en constante movimiento, se quedó a las puertas del gol. Acción de pura potencia del brasileño, que empezó una carrera prodigiosa lejos del área hacia los dominios de Chevalier, que salvó a su equipo del primero de los 'merengues'.
La réplica del Lille llegó poco después, en una doble ocasión que salvó Lunin. El ucraniano, sustituto de Courtois por lesión, le negó por dos veces el gol a Jonathan David. El canadiense se sacó un testarazo en el área que desvió el guardameta, que acto seguido metió de nuevo la mano porque el delantero fue al rechace y golpeó la pelota.
El Lille no se sentía intimidado por el Madrid, que continuaba mostrando su cara más habitual en los primeros tiempos. Solo marcó en Mallorca y frente al Espanyol en el Bernabéu, ni rastro de más en ese tramo en lo que llevamos de curso. Imagen de nuevo discreta y en la recta final llegó la puntilla. Zhegrova sacó un libre directo muy peligroso y el cuero impactó en la mano de Camavinga. Maurizio Mariani, que no vio nada en un primer momento, recibió el aviso del VAR y decretó el punto fatídico. Jonathan David tomó la responsabilidad y engañó a Lunin, que se tiró hacia el lado derecho.
A la vuelta de vestuarios, Ancelotti movió ficha con la entrada de Fran García por Mendy para intentar tener más presencia en ataque por la izquierda. Al italiano no le salió el plan, porque el español estuvo muy tapado por ese flanco, lo que obligó al propio 'Carletto' a tener que sacar más piezas al campo.
Después del susto de Zhegrova, cuyo remate se marchó cerca del palo derecho, Modric y Mbappé entraron al campo. El de Carrara decidió tocar el sistema nervioso del equipo y echó mano del croata y del francés, del que en la previa dijo que no estaba al 100% al igual que Rodrygo.
El de Bondy se le vio renqueante en algunas acciones y no tuvo incidencia en el juego. Al Madrid le costó el poder penetrar los dominios de Chevalier, que estuvo bastante tranquilo bajo palos. Los 'mastines' apenas estaban sufriendo cuando el conjunto blanco tocó la corneta en los instantes finales.
Tras 3 amarillas seguidas en el bando 'merengue' fruto de la ansiedad, las tornas cambiaron. El vigente campeón de Europa empezó a acechar con peligro la portería del Lille y Bellingham se quedó a nada de marcar. Vinicius centró al segundo palo, Arda Güler cabeceó y Jude, con el pecho, estrelló el cuero en el pecho de Chevalier. Acto seguido, el propio Vini lo probó en el área chica tras una mano del portero al cabezazo de Rüdiger, pero no tuvo suerte y mandó la pelota al limbo.
El siguiente que rondó el gol fue Arda Güler, al que Modric filtró un gran balón entre una maraña de rivales. Su cabezazo fue al muñeco. Esa fue la última de un Madrid que se desesperó porque no le acompañó la suerte en los últimos minutos, esa que siempre ha estado con él en esta competición últimamente.
Primera derrota en la nueva Champions y los blancos, que se quedaron a 1 solo partido de igualar la mayor racha invicta del club en la competición, se sitúan en mitad de tabla -17º lugar con 3 puntos-, mientras el Lille, que hizo un enorme encuentro, se puso prácticamente a la par de los 'merengues' -18º con 3 puntos también-. El mastín, con 9 bajas y con un chaval de 17 años debutando, cumplió su trabajo y con creces.