Domingo de resurrección en el Anxo Carro

Tres puntos de oro que se quedan en el Anxo Carro. El Club Deportivo Lugo ofreció un partidazo a su afición en un auténtico domingo de resurrección en el que volvió a ganar, volvió a llevarse la victoria 49 días después.

Porque el Lugo llevaba sin ganar desde el 4 de septiembre, cuando se impuso a domicilio al Zaragoza por un ajustado 1-2. Pero este domingo, en la duodécima jornada de Segunda División, los de Hernán Pérez volvieron a celebrar ante el Burgos. 

Y es que solo hubo un color sobre el verde, el de la camiseta de un Lugo que dominó de principio a fin el encuentro. Fue Alberto Rodríguez, cuando se había cumplido la primera media hora de partido, el encargado de abrir la lata con un buen cabezazo tras una asistencia medida de Zé Ricardo de falta. 

Arrancó la segunda mitad tras el ecuador el encuentro y, nada más volver a rodar el cuero, llegó el segundo tanto de los de Hernán Pérez. Porque apenas unos segundos se habían jugado cuando Chris Ramos aprovechó un error fatal de Míchel Zabaco, que le entregó el cuero en un intento de rechace, para marcharse totalmente solo en busca de la portería de Dani Barrio y firmar el 2-0 en el mano a mano.

Un marcador que ya no volvería a moverse en los minutos restantes del partido, pese a que los locales intentaron sin descanso ampliar la distancia en el luminoso. De hecho, lo consiguieron en el 74' por medio de Sebas Moyano, pero el colegiado Daniel Jesús Trujillo Suárez no dudó en anular el gol por una falta anterior de El Hacen sobre Aitor Córdoba.

Y si pocas esperanzas tenía el conjunto de Julián Calero, que apenas pudo hacer daño en la portería rival, de remontar el partido, todas ellas se esfumaron con la expulsión por roja directa de Curro Sánchez en el minuto 83 de partido, después de que le clavara los tacos en la rodilla derecha a Ces Cotos, una salvaje entrada que el árbitro castigó con la expulsión.

Con diez hombres sobre el césped, al Burgos se le puso todavía más cuesta arriba el partido, que llegó a su fin, tras cinco minutos de añadido, para alegría y euforia de la afición presente en territorio gallego, que volvió a celebrar una nueva victoria del Lugo. 

Un Lugo que consigue abandonar los puestos de descenso y adueñarse de la decimoséptima posición con 12 puntos, mientras que el Burgos suma su primera derrota del curso y se queda con los mimos 21 puntos que ya tenía en sus manos, en la tercera plaza.