No hay manera de que el Betis salga indemne de un partido en Europa. A pesar del triunfo ajustado ante el Celje en casa (2-1), los verdiblancos, el día de su centenario continental, volvieron a repetir la misma historia de siempre en su recorrido por el Viejo Continente. Esta vez, los de Pellegrini se dejaron llevar en República Checa, un país en el que sufrieron una decepciontante derrota.
El Mladá Boleslav, el 11º de su liga y que está inmerso en el 'play off' de descenso, fue de menos a más en el partido y desquició por completo a los andaluces. Lo Celso, al que le sobra calidad, se sacó de la chistera un golazo de falta, pero eso no le bastó a su equipo. Los de Heliópolis volvieron a protagonizar la película habitual en estas lides y los locales, en dos rechaces, le quitaron el botín de las manos a su oponente. No hubo ningún tipo de reacción y ya no hay margen para ceder más puntos.
Golazo de Lo Celso y relajación absoluta
El Betis, que estaba en plena celebración de su partido 100 en Europa, no tenía en la cabeza otra cosa que no fuesen los 3 puntos. El cuadro verdiblanco salió con iniciativa para tener la pelota y así poder tener control y llegadas en campo contrario. Sin embargo, el Mladá Boleslav le disputó la posesión y hubo una gran igualdad sobre el verde. Los dos eran conscientes de que no podían cometer ningún fallo, porque eso les condicionaría para el resto del encuentro. Dicho y hecho.
A los 16 minutos, un error en la salida del cuadro local propició una falta peligrosa a los andaluces en la misma raya de la frontal del área. Lo Celso la provocó y Lo Celso se encargó de poner el balón en el fondo de la red. El argentino, de vuelta a la titularidad tras salir de una lesión muscular, colocó el cuero con mimo y lo puso en el lado derecho de la portería de Trmal, que hizo la estatua y acompañó el esférico con la mirada.
Ese momento marcó un antes y un después, ya que el Betis bajó sus prestaciones y entró en una fase de siesta que le pudo costar caro. El Mladá Boleslav aprovechó esa circunstancia para crecer en el partido y rondar el área de Adrián San Miguel. En el último cuarto de hora, el equipo de Andreas Brännström contó varias ocasiones y ninguna de ellas acabó dentro de milagro. La defensa empezó a hacer aguas y ahí entró a escena el portero sevillano, que estuvo inconmensurable para taponar sendos remates de Vojta y Ladra.
Alegría y desesperación
Tras la reanudación, el Betis, que ya andaba con la mosca detrás de la oreja, intentó dejar atrás esos malos minutos del final del primer acto. El Chimy Ávila probó fortuna con un tiro cruzado dentro del área, pero el guardameta salvó los muebles y mantuvo con vida a su equipo. Esa parada fue clave porque, acto seguido, llegó una réplica inmediata de Ladra que derivó en el 1-1.
El '10' inició un ataque muy peligroso y abrió hacia un lado a Kusej, que cedió al segundo palo para la entrada del solitario Marecek. Adrián se hizo gigante bajo palos con dos intervenciones consecutivas, pero dejó muerta la pelota y apareció Vojta para meter la pierna y empatar así el encuentro.
Jarro de agua fría para todo el beticismo, al que no le dio ni tiempo a pestañear cuando los checos, 2 minutos después, le dieron la vuelta el choque. Kusej colgó el balón al área y Juanmi le dejó en bandeja el esférico a Marecek, que le pegó a la media vuelta. Otra vez Adrián metió la manopla y otra vez quedó el rechace franco para un jugador local. Vydra lo aprovechó y solo tuvo que empujar el cuero.
El Betis recibió un castigo que tenía merecido ante la pasividad de la defensa, que parecía que había pulsado el 'modo amistoso' desde el 1-0. La historia volvió a repetirse y el cuadro verdiblanco no pudo hacer nada para cambiarla, ni tampoco un Pellegrini que movió ficha en su banquillo sin encontrar lo que buscaba. Lo más potable fue Jesús Rodríguez, un chico con descaro que siempre buscó el uno para uno. Nadie más.
Hasta Lo Celso, que abrió la lata con un golazo, pagó su desesperación con una entrada al talón de Aquiles de Suchy, lo que le costó la roja directa. Una pérdida terrible para los andaluces de cara al siguiente compromiso y más teniendo en cuenta la situación de la clasificación.
El Betis se aleja de los 8 primeros puestos y ahora tiene que estar más preocupado por afianzar su posición de dieciseisavos que de caer a zona de eliminación. El conjunto verdiblanco está obligado a acabar con su peor versión en Europa, esa en el que se convierte en un equipo lento, plano, espeso y hasta apático. Esto ya pasó en Varsovia, pero también ha ocurrido ante el Dinamo de Zagreb, el Rangers, el Sparta de Praga... Por su parte, el Mladá Boleslav sumó sus 3 primeros puntos y sueña con poder continuar su etapa en la competición.