El conjunto dirigido por Steffen Baumgart tenía el pase a la siguiente fase de la Copa de Alemania en la mano. Sin embargo, unos malos últimos diez minutos llevaron el choque a la prórroga y después a los penaltis.
Y es que el Paderborn era feliz con el 1-3 en el marcador. De hecho, el conjunto de la Bundesliga tenía un pie en la siguiente ronda en el descanso, cuando vencía por 0-2 en el marcador.
Hünemeier puso el primero del partido con un golazo de falta directa. Le siguió, justo antes de pasar por los vestuarios, Antwi-Adjej con un disparo que llegó a parar Heimann aunque dentro de la portería.
El Rödinghausen, conjunto de la Regionalliga, fue capaz de reponerse gracias al tanto de Engelmann poco después de dar comienzo la segunda mitad.
Todo parecía sentenciado cuando Mamba puso el 1-3 a falta de 18 minutos para el final. Pero si algo tienen los equipos pequeños cuando se enfrentan a uno de mayor categoría es fe. Y a eso se agarraron los de la Regionalliga para mandar, con un doblete de Lokotsch, el partido a la prórroga.
Los 30 minutos no sirvieron sino para cansar aún más a dos equipos que se habían dejado todo en el campo y para hacer de preludio para unos penaltis que terminaron por coronar al Paderborn.