Un alivio de Champions

La Juventus, pese a haber despedido la temporada con otro partido paupérrimo, le ganó la partida a un Venezia que consumó el descenso (2-3) en la última jornada de la Serie A. La 'Vecchia Signora' disputará la próxima Liga de Campeones gracias a un penalti que convirtió Locatelli en el minuto 73.
El conjunto transalpino estará en la máxima competición continental a nivel de clubes. Evitó el desastre 'in extremis' en una temporada en la que gastó casi 200 millones de euros en fichajes y en la que volvió a decepcionar, tónica habitual en los últimos años.
Tuvo que llegar el croata Igor Tudor al banquillo para sustituir a Thiago Motta, presentado a principios de temporada como el salvador total de la deriva 'bianconera' y despedido como culpable de otra gran decepción.
Solo una acción individual de Conceiçao en el 73', cuando el partido marchaba con empate a dos goles, liberó la tensión de los transalpinos. Un más que ligero contacto en el área provocó la caída del extremo luso y un penalti que salvó el año al equipo turinés.
Locatelli, capitán y el jugador que se echó el equipo a la espalda, convirtió la pena máxima con madurez para certificar el objetivo.
Antes, en el minuto 2 del duelo, Fila puso patas arriba la clasificación con su gol. El Venezia, que necesitaba la victoria para salvarse, pujó fuerte y encontró rápido la recompensa. Le duró unos 20 minutos la alegría, lo que tardó Yildiz en empatar el duelo con un zurdazo en el 25' y Kolo Muani en darle la vuelta al marcador con un disparo potente dentro del área en el 31'.
Concedió demasiado el cuadro del Véneto, pero no dejó de creer. Y pese a ser inferior a la Juve, consiguió hacer daño simplemente con empuje hasta que, nada más comenzar la segunda mitad, Haps puso el empate a dos.
Ahí la 'Vecchia Signora' sintió miedo, porque la Roma estaba ganando al Torino. Los nervios pudieron con los 'bianconeri', congelados con la situación. Solo Conceiçao, siempre dispuesto el envite, al regate, al desborde, pudo desbloquear a los suyos sobre la bocina.
Tuvo tiempo incluso Tudor de dar minutos a Vlahovic, en lo que apunta a ser su despedida del conjunto transalpino.
El técnico, pese a haber conseguido el objetivo y pese haber perdido solo un partido de los ocho disputados, no tiene garantizada su continuidad el próximo curso. Por lo pronto, la Juve puede dejar atrás la mala temporada y pensar ya en el Mundial de Clubes. Porque jugará la próxima Liga de Campeones.