Entre Fer Niño, Lozano y Diego Collado volvieron absolutamente loco al Lugo, que no dio la talla en la ciudad deportiva del Villarreal en un duelo teóricamente por la permanencia en la categoría de plata del fútbol español.
La cita de este sábado en la hora del almuerzo era clave para Villarreal B y Lugo, que tenían en su mano alcanzar los diez puntos o, por contra, encadenar la segunda derrota consecutiva. El que mejor supo leer el encuentro fue el filial amarillo.
Aun así, comenzó avisando Chris Ramos, el goleador y mejor jugador de los gallegos. A los diez minutos, la fortuna dio la espalda a Pirri, que tuvo que ser sustituido por lesión por Jesús Fernández. La igualdad reinó en la primera media hora.
El Lugo parecía estar mejor plantado sobre el terreno de juego, atacando con especial intensidad por la banda de Loureiro y Señé. En el 35', sin embargo, Diego Collado asistió a Fer Niño en el área, desde donde fusiló a Whalley para el 1-0.
Al filo del descanso pudo empatar el Lugo, en un balón parado que pilló desprevenida a la zaga del Villarreal B. Juanpe, en el siguiente pase, estaba adelantado por escasos centímetros. Hubiera supuesto el empate para marchar a vestuarios.
Y nada más comenzar la segunda mitad, Fer Niño fue derribado en el momento en que iba a rematar en el área. Penalti que acabó transformando Diego Lozano, engañando con acierto a Whalley para duplicar la ventaja del 'minisubmarino amarillo'.
Con el Lugo aturdido, el Villarreal B hizo más daño en el minuto 66, cuando Diego Collado recibió en zona de peligro tras robo y colocó un buen chut raso al palo contrario. 3-0 en un abrir y cerrar de ojos, con casi media hora aún por delante.
Reaccionó el Lugo gracias al empuje de Chris Ramos, que mandó al fondo de las mallas un buen centro de Idrissa Thiam. Sin embargo, a los dos minutos, el goleador rojiblanco se fue expulsado por doble amarilla.
El Lugo apretó por mediación de Manu Barreiro y balones colgados a la olla, pero el Villarreal B se cerró y sumó su tercera victoria en lo que va de temporada, lo que le coloca en posición de 'play off' de manera momentánea y contra todo pronóstico.