La Romareda impartió justicia en la decimoctava jornada de Segunda División y determinó que el cara a cara entre el Real Zaragoza y la UD Ibiza finalizara con victoria local por 2-1, después de 90 minutos en los que los de Fran Escribá fueron superiores a sus rivales.
Fueron superiores en cuanto al juego, pero no en rendimiento, ya que el Ibiza apenas necesitó un par de llegadas al área rival para abrir la lata, pese a que el Zaragoza llevaba dominando el encuentro durante más de media hora.
El encargado de abrir la lata en el minuto 33 de partido fue Juan Ibiza, justo cuando el cuadro de Escribá estaba disfrutando de sus mejores minutos frente a su afición. Tras un saque de esquina, la zaga del Zaragoza consiguió despejar el peligro, pero el rechace lo cazó Martín Pascual, para asistir con la testa a Juan Ibiza, que reventó el cuero con un cabezazo imparable ante el que nada pudo hacer Ratón.
Los de Lucas Alcaraz le dieron la vuelta a la tortilla para ser ellos ahora los encargados de arrinconar a sus rivales en el área, unos momentos de muchísimo sufrimiento para el conjunto local, lo que generó el enfado monumental de la grada de La Romareda.
Pero el conjunto local no se quedó de brazos cruzados, ni mucho menos, y terminó dándole caza al empate gracias al tanto, también con la testa, de Jair Amador en el minuto 68 de partido. El zaguero portugués, al igual que en el primer tanto del Ibiza, se impuso a sus rivales en el salto y superó al guardameta rival con un magistral testarazo, tras un centro medido de Vada.
A partir de este tanto, el partido se convirtió en un ir y venir de oportunidades, con el balón corriendo de punta a punta del terreno de juego. Con el crono corriendo en contra, todo parecía sentenciado a finalizar con reparto de puntos en el marcador, hasta que apareció Serbio Bermejo, el protagonista del partido.
En el 91', cuando solo restaban tres minutos para el final del partido, Bermejo culminó la remontada del Zaragoza y desató la locura en La Romareda tras superar a Fuzato bajo palos con un lanzamiento ajustado a la madera. Con suspense entró el cuero en la portería rival, antes de que el estadio estallara de alegría.
Y con este definitivo 2-1, el partido llegó a su fin, un resultado que permite al Real Zaragoza adueñarse de la decimoquinta plaza con 21 puntos, mientras que el Ibiza sigue sin poder dejar de ser el colista de Segunda División, con solo 12.