Siempre hablamos de las cinco grandes ligas como el referente que marca la pauta. En Europa y en el todo el planeta fútbol. Y muchos años hemos vivido aferrados a que la española es la mejor liga del mundo. Pero eso ha cambiado. Estamos, de hecho, en plena 'era Premier'.
Una vez más, recurrimos a la mirada de científica de ProFootballDB para examinar los indicadores de esta nueva realidad. Partamos del ELO, ese valor cada vez más instaurado en un análisis que se precie, para sentar las bases del estudio. Recordemos: es un termómetro que mide el nivel de los jugadores en función de determinadas variables (goles, asistencias, entidad de los rivales, dificultad de las competiciones, estado de forma...).
Otra singularidad del ELO es que se actualiza a diario. Teniendo en cuenta ese factor y que solo Alemania está en juego, los resultados actualizados nos dejan el dominio de la competición inglesa, gracias a su media de 71,17; es la población futbolística donde más talento se acumula. LaLiga, que ha cedido su trono en los últimos años, figura a menos de dos puntos de diferencia (69,74). Datos y sentir general se dan la mano en la Serie A, la que cierra el podio (67,84).
Eso sí, a la Ligue 1, históricamente tenida por la más floja de las cinco, el ELO la coloca muy cerca de la italiana, a apenas 0,54 puntos (67,3). Gracias en gran parte a que el PSG de los últimos años ha ido acumulando estrellas en su plantilla. La Bundesliga se queda en el último escalón (66,32) para ser la peor (si es que ese calificativo es apropiado) de las cinco.
Las Ligas como museos
En el fútbol moderno, se ha usado por costumbre el concepto 'Liga Escocesa' para hablar de competiciones sin interés, menores, por la falta de alternativas para ganar el título. Celtic y Rangers se repartían el título (ahora ya ni eso, el Old Firm ya es de pleno color católico), no había más. Eso dejaría en muy mal lugar a la Bundesliga (el Bayern ya tiene en su mano el octavo título seguido), la Ligue 1 (el PSG se ha llevado siete de las últimas ocho) e Italia (la Juve lleva ocho ‘Scudetti’ seguidos y arrancará el reinicio como líder).
Tampoco LaLiga sale muy favorecida, pues un único título del Atlético (temporada 13-14) interrumpió el duopolio del Barça y Madrid en los últimos 14 años, y va camino del decimoquinto.
La Premier es la que más se desmarca en ese sentido, puesto que el Liverpool se convertirá en esta edición, salvo tragedia, en el cuarto campeón distinto en los últimos cinco años (Leicester, Chelsea y City fueron los anteriores).
Eso sí, en datos de este milenio, la Ligue 1, con ocho campeones diferentes, ha sido la más animada. La Premier llegó a seis (incluimos ya como campeón al Liverpool por su casi inalcanzable ventaja) y Alemania se quedó en cinco. En Italia y España hubo cuatro.
El mapa de los jugadores más valorados
Sin embargo, hoy en día el nivel de las ligas lo marca más el nivel de sus jugadores que la competitividad entre sus integrantes. Y ahí encontramos la respuesta al liderazgo de la Premier.
Siete de los 18 jugadores con más de 90 puntos de ELO militan en su competición. Se trata de Kane, Aubameyang, Bruno Fernandes, Raúl Jiménez, Alisson, Salah y Van Dijk. Siempre fue una competición atractiva por su anarquía táctica, por los partidos de ida y vuelta; ahora al combo se añade el talento de sus integrantes.
Casi el doble que LaLiga, donde la colección de 'cracks' de primer orden se limita a los Luis Suárez, Messi, Sergio Ramos y Benzema. Además, no podemos obviar que todos ellos han superado la treintena. Se va cerrando un ciclo en España.
Cristiano Ronaldo, Immobile y Lukaku son los únicos con ese honor en la Serie A. No es casualidad que sean uno de cada uno de los tres primeros clasificados.
Tanto en Alemania, con Lewandowski y Werner, como Francia, con Neymar y Mbappé, solo dos jugadores andan en el umbral de los superclases. Responden a un fútbol más añejo: ligas de menor nivel con muy pocos 'cracks' por encima de la media.
Pero no queda ahí la cosa. Si el ELO medio de Inglaterra resulta el dominante es porque domina esa clasificación de los jugadores en los cuatro primeros segmentos de puntuación (más de 90, de 86 a 90, de 81 a 85 y de 76 a 80). 170 de sus 464 jugadores están en ese rango. Es decir, el 36,64% de los futbolistas de su liga.
El dato cobra más realce teniendo en cuenta que, considerando ese mismo tramo, en la siguiente liga, la española, el 27,5% de sus jugadores tiene 76 o más puntos de ELO (129 de sus 469).
Italia se queda en un 26,21%; Francia, en el 21,83%, y Alemania, con 17,65%, es el único que baja del 20%.
Si ya hemos comentado el promedio de ELO de cada competición, la moda (el valor que más se repite) nos deja un jugador tipo en la Premier de entre 76 y 80 puntos:, de entre 71 y 75 en España; de entre 66 y 70 en la Bundesliga; de entre 61 y 65 en la Ligue 1 y de 55 o menos en Italia. Grosso modo, es un retrato robot de lo que podemos encontrar.
Viéndolo en perspectiva, eso significa que en Alemania y Francia hay más clase media, mientras que la Serie A es una competición que contrasta talento y mediocridad.
Evolución y perspectivas
En términos globales, vemos un reparto casi equitativo de estrellas por las cinco competiciones; cada una cuenta al menos con un 'crack' de más de 90 de ELO. No obstante, la mayoría del talento fluctúa más hacia la Premier,
Varios factores han redibujado el mapa de este cambio. El gran motor ha sido el económico. La Premier es la competición de mayor poder adquisitivo en los últimos años. Además, cuenta con un reparto más equitativo de los derechos de televisión. Los ingresos por dicho concepto del último clasificado equivalen a los de un equipo de competición europea en otras ligas.
Además, se acabó la coexistencia de Messi y Cristiano Ronaldo, algo que ha ido relegando a España de la primera plaza. De hecho, la mudanza de españoles a la Premier ha sido una constante en los años recientes. Todo comenzó con los entrenadores (Rafa Benítez, Pellegrini, Guardiola, Pochettino, Emery…), pero la apuesta se amplió a jugadores de referencia. Rodri, Fornals, Kepa, Deulofeu, Ayoze, Ceballos... y muchos de ellos tras grandes inversiones.
En cuanto a Italia, amenaza con seguir creciendo en los próximos años debido al mejor régimen de tributación para los jugadores. Lo de Cristiano Ronaldo y De Ligt fue el gran aviso; en campañas venideras no sería de extrañar que el ELO medio permitiera al campeonato italiano ascender a la segunda plaza.
Premier League
Analizamos ahora la evolución del ELO de los principales clubes en cada competición desde el año 2000. Lo más llamativo en este periodo ha sido el empoderamiento del Manchester City, que ha subido 30 puntos su media en 20 años. La gráfica explica visualmente el crecimiento económico desde la llegada del holding del jeque abudabí Mansour Al-Nahyan. A golpe de talonario, el talento ha ido enriqueciendo el plantel 'citizen'.
Además, apreciamos que el Manchester United, pese a su crisis de títulos reciente, nunca ha bajado de los 90 puntos de ELO. Chelsea y Liverpool han llevado trayectorias erráticas, a la baja los londinenses en los últimos años, al alza los ‘reds’.
Posteriormente, comprobaremos también que es la única de las cinco grandes ligas en las que todos sus representantes están por encima de los 90 puntos.
LaLiga
La gráfica española la disgregamos desde dos focos. El primero es la eterna pugna entre Barcelona y Real Madrid. Aunque nunca ha habido una diferencia mayor de seis puntos, ha sido un milenio ligeramente más azulgrana. Su curva apenas ha descendido, la blanca tuvo un lustro de descenso (de la temporada 03-04 hasta la 08-09). En la actualidad, el Barça presenta una pequeña ventaja.
Además, ambos alcanzaron en la temporada 17-18, la del Madrid de los cuatro títulos (Champions, Mundial de Clubes y las dos Supercopas) y del doblete doméstico del Barça, los 99 y 98 puntos de ELO, el techo en nuestro estudio de las cinco grandes ligas, respectivamente.
El otro prisma lo representan Atlético de Madrid y Sevilla, que se han sumado el club de la élite en la última década. Apilando las Europa League, los de Nervión rebasaron los 90 puntos hace tres temporadas. Por su parte, los rojiblancos no se bajan de ese escalón desde hace siete años. Eso sí, la alternativa al duopolio se ha limitado a eso, la clase media prácticamente no existe en España.
Serie A
En Italia, el escándalo por corrupción ('Calciopoli') y la quiebra del Nápoles son los responsables de la gráfica más irregular de todas. Además, engloba a seis equipos diferentes.
Nadie se salva de picos y valles. La Juve podría haber dibujado una curva más regular de no ser por su descenso administrativo. Eso sí, creció exponencialmente en su regreso a la Serie A el año siguiente y en el último lustro su valor ha sido altísimo.
El recorrido del Milan dibuja claramente sus épocas de éxito (Champions en 2003 y 2007) y fija en 2012 la caída en picado. Hace siete años que su ELO no llega a 90. Una tendencia similar que la de los otros ocupantes del Giuseppe Meazza, aunque sus últimos tres años reflejan un claro crecimiento. Con todo, la puntuación del Inter es la cuarta en la actualidad.
Es el de la Roma el que parece en tercer lugar (mucho obedece al ciclo dorado con Totti). Actualmente, viven su segundo tramo de mayor valoración en los últimos tres años; en la temporada 07-08, eso sí, alcanzaron su tope de 92. Su última década es de crecimiento.
Paralelamente, dos tendencias cruzadas. La Lazio, que entró al milenio como campeón en la 99-00 con los Verón, Nedved, Salas o Simeone, pasó una década en caída hasta que el Nápoles le fue quitando ese escaño. Los partenopeos, que en 2005 andaban reinventándose en Serie C (los datos de ELO solo se miden en categorías profesionales), hilaron dos ascensos consecutivos. Desde entonces, su puntuación ha crecido cada año hasta los 91 de hoy en día.
Ligue 1
Hay un antes y un después en el PSG desde la llegada de Nasser Al-Khelaifi y el dinero catarí. Aterrizaron en 2011: desde entonces, el ELO ha crecido una media de 10 puntos. El cuadro parisino comenzó el milenio como el tercer equipo más valorado de Francia, y ahora suma seis años sin que nadie se le acerque de verdad.
Aunque se observa una mejora general, la irregularidad motea la gráfica de la Ligue 1. Aquí nos encontramos un panorama de rachas: la del Lyon hasta 2013, coincidiendo con los años de sus siete títulos consecutivos; o la del Mónaco, interrumpida por su descenso en 2011.
El Olympique de Marsella, a pesar de que en los últimos años no atraviesa sus mejores momentos, es de los que marca un surco más regular y exitoso; sus variaciones de ELO se mueve en una horquilla de diez puntos.
Bundesliga
Aquí la tiranía es la única palabra posible. El Bayern de Múnich, incluso cuando no ha ganado los torneos, ha sido el gran dominador del fútbol alemán. La prueba se parecia en que su ELO ha tenido como suelo los 92 puntos y los 97 de techo. Su línea es casi recta.
Una sensación muy similar ocurre con el Bayer Leverkusen, apenas estropeada en los últimos dos años. Arrancó el milenio como alternativa al Bayern, aunque en la última década, pese a su buen hacer, vive a la sombra del Borussia.
Y es que el equipo aurinegro, que tuvo un punto de inflexión con Klopp y supo cambiar una crisis institucional galopante por una envidiada política de fichajes que hoy en día se mantiene, empezó a confirmarse como la gran alternativa al Bayern al comienzo de la segunda década.
Más allá de esas constantes regulares, nos quedamos con la súbita y exitosa incorporación del Hoffenheim y el RB Leipzig a la burguesía alemana. La llegada de Dietmar Hopp cambió la historia de un equipo de barrio brutalmente con una gran inyección económica que derivó en el ascenso a la Bundesliga en 2007. Y de ahí, incluso a la Champions. De 43 de ELO a los 77 actuales.
En cuanto a la franquicia de Red Bull, tras cuatro ascensos en siete años, alcanzó la élite en la temporada 16-17, para convertirse en una alternativa a las plazas europeas desde el primer día. Lleva un lustro creciendo sin techo y va camino de sumar otro año en Champions.
Un vistazo a todas las ligas a la vez
Rematamos el estudio como lo comenzamos: significando el dominio de la Premier League sobre las otras ligas. Para ello, rescatamos el ELO promedio de la temporada (no el valor actual). Pese a que la sensación es la de que ese mando se lo habían quitado a LaLiga en los últimos años, lo ha mantenido en el todo el milenio. Es más, lo que ha pasado en las dos últimas campañas es que España se ha vuelto a acercar.
Otra cuestión que nos llama poderosamente la atención es que LaLiga atravesó un fuerte bache entre 2009 y 2015, justo una época de fortísimo duopolio (y baja competencia doméstica en el resto), cuando se alternó la segunda posición con Italia y Alemania (en la 09-10 llegó a ser la cuarta liga).
La Ligue 1 casi ha quedado reducida al poder adquisitivo del PSG, faltan alternativas; por el contrario, la mayor clase media-alta (Manchester City, Liverpool, Arsenal, Tottenham, Chelsea, United) ha dado más pujanza a la Premier
Como rasgo común, observamos que las cinco grandes ligas han ido elevando su nivel de ELO, lo cual fortalece esa sensación de unidad de las cinco grandes ligas como gran referente mundial. Para ello, la irrupción entre los mejores de equipos como Nápoles, RB Leipzig o Sevilla ha sido fundamental.