Resulta curioso. Porque Pep Guardiola se deshizo en elogios tras conocer la contratación del belga por el Real Madrid. Pero en su momento no apostó lo suficiente por él, cuando el equipo azulgrana se lo podría haber llevado por cinco veces menos de lo que le costará al club blanco.
Hay que ubicarse en el verano de 2011, aunque todo comenzó el año anterior, cuando trascendió que el Barcelona seguía a Hazard, por entonces empezando a escribir su historia en el Chelsea siendo un veinteañero. Pero fueron David Villa, Javier Mascherano y Adriano las apuestas de aquel mercado.
Al siguiente, tras haber cedido el trono de Liga al Madrid de Mourinho, tocaba sacar bíceps en la ventana veraniega para recuperar el sitio. Y con Hazard de nuevo a tiro, al igual que Javier Pastore, finalmente los responsables deportivos, Guardiola en el banquillo y Begiristain en la secretaría técnica, prefirieron dar la alternativa a Alexis Sánchez, que había despuntado en el Udinese.
"Es muy joven, puede jugar en las tres posiciones de ataque, tiene mucha intensidad defensiva, es muy vertical, desequilibrante y, por lo que me han dicho, muy buen chico", comentó entonces Pep del chileno, que costó 26 millones más once en variables.
Quien pudo haber sido estrella del Barcelona junto a Messi será un rival que promete discutir seriamente la hegemonía azulgrana en Liga a partir de la próxima campaña.