Un joven de 21 años, debutó en la temporada 1999/00 en La Bombonera. En aquel entonces, Riquelme apenas era un novato en Argentina, pero solo le bastaron dos cursos para convertirse en imprescindible en el equipo. Y pronto le llegaron las ofertas desde Europa.
En la campaña 2002/03, el Barcelona llamó a su puerta, y no dudó en aceptar el reto. Estuvo solo un año en la Ciudad Condal antes de poner rumbo al Villarreal, un equipo que marcó su carrera deportiva. De la mano de Manuel Pellegrini, el mediocampista argentino llegó a unas semifinales de Champions, aunque la fortuna no le sonrió en un lanzamiento desde el punto de penalti que nunca olvidará.
Tras su corta etapa en España -cuatro temporadas-, Riquelme decidió regresar a casa, a La Bombonera. En Boca Juniors pasó otras siete campañas, hasta que las lesiones y su bajo rendimiento le obligaron a dar un paso atrás. Fue entonces cuando decidió finalizar su carrera en Argentinos Juniors.
Tras su retirada, de la que se cumplen cuatro años, la hinchada del 'Xeneize' sigue recordándole día a día. Durante muchos partidos, las gradas de La Bombonera corean su nombre, al igual que cuando el argentino visita el campo que le vio nacer y sentirse futbolista.
De hecho, una de las jugadas que siempre será recordada es el caño y regate en la banda derecha que firmó en uno de los 'Superclásicos' ante River Plate. Una magia que será imposible de borrar para los aficionados del conjunto 'azul y oro'.
25 de enero de 2019