La táctica de la Juve: fichar al verdugo, debilitar al rival

Tras superar la competencia del Barcelona o del París Saint Germain, la Juventus se hizo con De Ligt, capitán del Ajax y, a sus 19 años, el defensa de más proyección del fútbol mundial, a cambio de 85,5 millones de euros.

El club turinés, que apostó este año por un cambio radical en su estilo de juego, encomendándose al técnico Maurizio Sarri para practicar un fútbol más técnico y ofensivo, apostó por De Ligt para reforzar y rejuvenecer su zaga de cara a un nuevo asalto a su anhelada Liga de Campeones.

El zaguero holandés es uno de los jugadores más apreciados además por Cristiano Ronaldo, que se cruzó con él en un Portugal-Holanda de la última Liga de las Naciones de la UEFA y que le planteó la idea de compartir el vestuario de la Juventus en la próxima campaña.

Algo que se concretó oficialmente este jueves, con De Ligt que llegó a Turín de forma parecida a la de CR7: ovacionado por la afición y en calidad de reciente verdugo del cuadro turinés en la Copa de Europa.

Era el pasado 16 de abril cuando el defensa holandés saltaba al campo del Allianz Stadium de Turín con el brazalete de capitán del Ajax, en la vuelta de los cuartos de final de la Liga de Campeones, tras el 1-1 de la ida del estadio Johann Cruijff Arena.

La todopoderosa Juventus, que venía de remontar un 2-0 adverso contra el Atlético Madrid en octavos gracias a un triplete de Cristiano, se adelantó gracias al propio CR7, quien se adelantó a De Ligt y envió el balón al fondo de las mallas.

Sin embargo, el Ajax consiguió empatar por medio del holandés Donny Van De Beek y, en la reanudación, apareció precisamente De Ligt para marcar de cabeza el golazo del 2-1, que eliminaba a la Juventus y que enviaba al cuadro de Amsterdam a las semifinales.

El capitán le daba al Ajax un resultado histórico en Turín y hurgaba en la herida de una Juventus que lleva 23 años sin llegar a la cumbre de Europa, en un periodo en el que perdió además cinco finales (1997, 1998, 2003, 2015, 2017).

Tres meses después de esa noche, la Juventus acordó con el Ajax el traspaso de De Ligt, que se sumará a una zaga que ya cuenta con Giorgio Chiellini y Leonardo Bonucci.

Esta operación se produjo de forma parecida a la del año pasado, cuando el cuadro turinés pagó 112 millones de euros al Real Madrid para fichar a Cristiano Ronaldo, una operación récord para el fútbol italiano. Nunca ningún jugador había costado tanto ni había tenido un contrato más alto, con sus 31 millones netos por temporada.

También en ese caso, CR7 había sido el verdugo de la Juventus en la Copa de Europa anterior, al endosarle tres goles en los dos partidos de los cuartos de final, uno de ellos con una chilena para la leyenda precisamente en Turín.

En la vuelta del Bernabéu, con la Juventus a punto de lograr una remontada histórica, al ir ganando 3-0 tras perder la ida con el mismo resultado, volvió a aparecer Cristiano para anotar el penalti que enviaba al Madrid a las semifinales y, sucesivamente, a la final de Kiev ganada contra el Liverpool.

La historia se repitió este jueves. De Ligt y Cristiano ya visten la camiseta 'bianconera' y se preparan para el enésimo asalto a la Copa de Europa en la nueva temporada.