Todos los aficionados del Chelsea (y también todos los del Barcelona) siguen teniendo en la retina su famoso gol de vaselina en la semifinal que midió a 'blues' y 'culés' en la Champions 2012.
Aquel tanto clasificaba momentáneamente al cuadro londinense a la final, cosa que certificó el mítico gol de Torres en el añadido. Pero aún sin ese tanto del español, el equipo inglés hubiera jugado el gran duelo gracias al golazo del brasileño.
Ramires fue uno de los héroes ese año de un Chelsea que se proclamó, contra todo pronóstico, campeón de Europa tras vencer en la finalísima de Múnich al Bayern en la tanda de penaltis.
Ahora, siete años después, uno de los miembros más importantes de aquel conjunto campeón se encuentra sin equipo a sus 32 años.
Y es que el brasileño, tras varios meses de rumorología, ha llegado a un acuerdo con el Jiangsu Suning de la Liga China para la rescisión de su contrato.
De esta manera, Ramires está ahora disponibles para elegir una nueva aventura en su dilatada y exitosa carrera profesional, la cual podría tener su próximo destino en Europa.
El verano pasado y en el último mercado invernal se estuvo hablando mucho de un posible retorno del jugador al Benfica, pero su situación en el club chino no le permitió salir.
Ahora, sin ninguna cadena que le ate, el brasileño podrá decidir libremente su futuro para seguir engrosando un palmarés que siempre tendrá la guinda de aquella Champions League.