Dani Benítez, de 30 años, natural de Palma, fue una estrella fugaz en Granada. Vivió dos ascensos, se hizo grande de la mano del entrañable Fabri y hay quien incluso lo pidió para la Selección pese a su carácter díscolo.
Tras un partido ante el Betis, en el que además fue expulsado, tuvo que pasar por el antidoping. El jugador ya sabía lo que pasaría. "Estaba en casa con unos amigos. Había bebido y así no podía entrenar. Consumí cocaína porque quería ejercitarme. Aguanté como pude y lo hice", declaró hace pocos meses en 'Ideal'.
Siempre mantuvo Dani Benítez que fue algo puntual, que nunca fue adicto, que pasó cientos de controles y jamás ninguno le dio una mala noticia. Pese a los intentos y recursos, dos años de sanción. "Lo pasé bastante mal. Y con el paso del tiempo también me encontré muy mal. Necesité ayuda psicológica. Pero al final todo se supera", ha señalado.
"Piensas si volver o no volver. Y hubo una época en la que no quería volver. Pero, al final, pasa el tiempo y te das cuenta de que lo que sabes hacer es jugar al fútbol", afirmó también en 'El Español'.
No busca culpables y ni siquiera critica a los que le fulminaron. Tampoco esconde que durante su juventud tuvo amistades complicadas y que hubo un momento en que salía demasiado. "Ahora estoy mucho más tranquilo", afirma. Su objetivo tras acabar la sanción era volver a jugar "en Primera o Segunda". No le ayudaron las circunstancias tras su positivo: duró un día en el Huesca y se lesionó en el Alcorcón.
Dani Benítez se excusa con que le cambiaron algunas condiciones del contrato que le presentó el Huesca. Se lesionó en Madrid y no le ayudó el cambio de técnico. Pero en 2017 le empieza a cambiar la suerte.
Pone la vista atrás y le queda la espina de no haber debutado con el primer equipo del Mallorca, con el que se inició. El curso pasado se rehabilitó futbolísticamente en el Racing de Ferrol: 26 partidos y 6 goles.
Aunque su objetivo era seguir en España, llegó el AEL Limassol de Chipre. Marcó un golazo en la previa de la Europa League, aunque su equipo cayó en una de las rondas clasificatorias. Ahora busca seguir brillando.
"Creo en mí y al final eso es lo importante: sentirte bien con lo que estás haciendo y con lo que has hecho. He cambiado muchas cosas de mi vida y con eso estoy satisfecho", sentencia Dani Benítez. El fútbol le espera.