El caso de Lee Seung-Woo era especial. Había quienes le llamaban el 'Messi coreano' y razones no les faltaban, ya que por su estilo de juego y su manera de driblar recordaba a la 'Pulga'. Apuntaba a ascender al primer equipo tras su incursión en el Barça B, pero la sanción de la FIFA le cortó las alas.
El coreano ya había sido internacional Sub 17 y Sub 20 y quería seguir creciendo como futbolista, por lo que decidió dejar el Barcelona para llegar a un club en el que sí pudiera jugar, encontrando refugio en el Hellas Verona durante el pasado mercado de fichajes.
En la Serie A no ha tenido demasiados minutos durante la presente temporada, ya que esta ha sido su primer año en el fútbol de élite y ha acusado bastante el cambio de nivel, pero ha disputado 16 encuentros, en los que ha firmado un gol.
Pese a sus números un tanto discretos en Italia, Lee Seung-Woo ha sido uno de los 23 elegidos por el seleccionador de Corea para representar al país en Rusia. Hace poco más de un año no podía jugar debido a la multa de la FIFA y dentro de dos semanas estará jugando la competición que todos sueñan con ver de cerca. Cómo cambia la vida.