Todo ocurrió en el Alessandria-Lucchese. El encuentro, que se puso 0-2 a favor del equipo de Favarin, acabó en empate por la tromba ofensiva local en los últimos minutos y, a segundos de concluir, estalló una tangana.
En el minuto 95, varios jugadores de ambos equipos e incluso los dos entrenadores se enfrentaron. Giancarlo Favarin fue expulsado, pero antes de dejar el campo se enfrentó al técnico rival.
Hubo algunas palabras y todo terminó con Favarin propinándole un cabezazo salvaje a Gaetano Mancino, que cayó súbitamente al suelo al recibir un fuerte golpe en la barbilla.
Favarin explicó que su rival le estuvo provocando durante el tramo final del partido y que incluso también le había escupido, pero el Alessandria niega dicha versión de los hechos.