Primero fue el tobillo, luego fue el coronavirus. Ha sido un largo camino lleno de piedras y obstáculos el que ha separado a Óscar de Marcos de su partido número 400 con el Athletic Club. Pero por fin llegó.
Ha tenido que esperar dos meses, desde mediados de septiembre. "Tenía ganas de volver con el equipo. He tenido muchos problemas de tobillo. Me encuentro bien. Luego el coronavirus. Ya estoy de vuelta", explicó el veterano lateral, tras el partido en el Coliseum.
"He conseguido llegar a los 400, que llevaba dos meses buscando. Es un orgullo para mí defender al Athletic. Para mí es un satisfacción muy importante y estoy contento de haber llegado hasta ahí", continuó.
También analizó el duelo. "Creo que la primer aparte ha sido muy buena por nuestra parte. En un campo muy difícil hemos tenido el dominio de los 45 minutos. Nos hemos puesto por delante y eso es verdad que nos ha dado confianza", expuso.
"En la segunda ellos han salido fuertes. Lo sabíamos. Nos han metido un poco atrás y quizá no hemos conseguido salir con mucho peligro y eso ha sido lo que a ellos les ha dado esa confianza para seguir avanzando metros", añadió.
"Después del empate hemos retomado, hemos vuelto a área, se ha igualado un poco más el partido y en ese tramo creo que no ha habido ni ocasiones claras en ninguna de las dos porterías", dijo también De Marcos, quien insistió en lo importante del punto por las sensaciones obtenidas en el partido.