De Marcos es daltónico. Y en un oficio en el que los colores son tan importantes, no es un tema nimio esta dificultad en la visión. El futbolista del Athletic atendió a 'Relevo' y habló de ello con naturalidad, además de aportar alguna que otra anécdota curiosa que le ha ocurrido en los terrenos de juego a consecuencia de esta alteración.
El '18' ya tuvo algunos síntomas de pequeño, como cuando pintó el césped de color marrón y todos sus compañeros se sorprendieron. Pero fue en la adolescencia cuando descubrió que padecía daltonismo: "Yo no me la suelo jugar con la ropa para no cagarla y me fui a comprar un jersey con mi hermano. Cuando estaba por el pueblo, me dijeron, 'qué moderno, con un jersey rosa'. Le pregunté a mi hermano: '¿cómo que rosa?' Y me dijo 'no sé, yo también lo veo blanco'. Cuando llegamos a casa, mi madre nos confirmó que era rosa y empezamos a pensar que veíamos mal. Yo tendría 15 años y mi hermano, 18".
Pero De Marcos ha sabido adaptarse para no tener demasiados problemas en el fútbol. De hecho, durante la entrevista, recalca que es daltónico, "no ciego", ante las numerosas preguntas que le suelen hacer al enterarse de esta condición. Sí es cierto que, con ciertos tonos, se le complica la cosa al jugador, tal y como le ha pasado en más de un entrenamiento con petos rosas, verdes y azules.
"Ernesto Valverde lo sabe perfectamente, pero, como no teníamos otra opción, tuvimos que entrenar con esos petos. Yo estuve en un lado del campo y jugábamos un 2x2 más uno y, en ese caso, en mi zona lo veía bien. Es verdad que, cuando tenía que meter el pase dentro, había uno que iba con el peto verde, que era el comodín. Y yo, muchas veces, no sabía si era de mi equipo o era de los que defendía con los rosas", explicó.
En el club y en LaLiga, siempre han puesto facilidades con las equipaciones para que los daltónicos tengan el mínimo problema posible con los colores. Pero en otros ámbitos, a De Marcos sí le cuesta un poco más. Por ejemplo, con las tarjetas amarillas y rojas: "Ahí sí que tengo muchas dificultades".
"Expulsaron a Villa (en un Athletic-Barça) y yo estaba jugando en aquella época de delantero. Fue como una pequeña tangana y (el árbitro) le sacó algo y la gente se puso eufórica. Y yo le pregunté a Piqué que estaba al lado: '¿Le ha sacado roja?' Y me dice, 'sí, ¿no ves?' Y le dije: "Pues la verdad que no veo nada, soy daltónico", relató.
Hasta hoy, y que se sepa, De Marcos es el 2º futbolista que admite ser daltónico. Thomas Delaney, internacional con Dinamarca, ex jugador del Sevilla y actualmente en las filas del Anderlecht, ya habló públicamente de esta dificultad antes del Mundial de Rusia, una alteración que, al igual que al '18' del Athletic, no le ha impedido rendir a gran nivel.