Justo el día en el que David Villa anunció su retirada definitiva, Riccardo Montolivo se sinceró en términos similares en Italia. El veterano internacional italiano, salvando las enormes distancias con el asturiano, también fue uno de los jugadores más importantes del país transalpino en la última década.
Ahora, denunció el maltrato que recibió en los últimos años en el Milan y se declaró "condenado a renunciar" al fútbol.
"Por el bien del club, no he hablado nunca. Pero, tras siete años, me quitaron el brazalete, me mandaron con el equipo Primavera... y ni eso", habló de su disgusto con el Milan.
"He decidido dejar un mundo que ya no me gusta. Jugué la última vez en mayo de 2018, en el Atleti Azzurri d'Italia, el mismo campo en el que comencé 16 años antes. Dos años en el Atalanta, siete en la Fiorentina y siete en el Milan. Aunque el último ha sido un calvario", continuó el ex 'rossonero'.
Montolivo recordó que le prometieron contar para el equipo, pero ni tan siquiera le dejaban entrenar con los miembros de la primera plantilla: "Siempre entrenaba solo o con Halilovic. Cuando me usaban en los entrenamientos, era siempre en posiciones que no eran las mías".
Y lamentó un feo gesto del Milan, que le retiró el brazalete de capitán para dárselo a un recién llegado como Bonucci. "No fui yo quien le pasé el brazalete. Me dijeron que Yonghong Li había ordenado dárselo a uno de los nuevos. Me opuse porque me pareció injusto, les dije que había jerarquías en los vestuarios que se debían respetar. Hablé de Bonaventura, de Romagnoli... pero no, a Bonucci", recordó el ex futbolista italiano.
A pesar de esta negra etapa, el jugador acumuló 492 partidos oficiales en el fútbol italiano, en los que hizo 36 goles y dio 31 asistencias. Fue internacional 67 veces con Italia.