"Dembélé se merece el Balón de Oro"

El PSG por fin pudo quitarse la 'espinita' clavada de la final de Champions perdida en 2020. El conjunto parisino logró en Berlín su primera Liga de Campeones tras endosarle una 'manita' al Inter y lo hizo bajo la dirección de Luis Enrique en el banquillo. El asturiano, ya tras el partido, pasó por los micrófonos de 'Movistar' y se mostró muy feliz por el éxito logrado.
"Hacer historia es muy bonito. Había un exceso de tensión, pero me sorprendieron los jugadores por su madurez y su tranquilidad. Nunca esperas estar a este nivel. Los jugadores dieron un paso adelante en la temporada. Doué es de la generación de Lamine Yamal, de esos chicos que se toman estas cosas como una fiesta", empezó diciendo el técnico asturiano.
"Hemos sabido gestionar esa presión. Hay tanta excitación que es difícil jugar el partido. Hemos llegado jugando, queríamos ganar la final jugando. El Inter ha jugado bien, pero no le hemos dejado", aseguró Luis Enrique, que lanzó un aviso a navegantes: "Hemos hecho historia, pero esto no para aquí".
De pronto, Nasser Al-Khelaïfi, presidente del PSG, apareció en plena entrevista y pronunció unas palabras sobre la figura del preparador: "Luis Enrique es el mejor entrenador y el mejor hombre".
A continuación, el asturiano se dedicó a elogiar a varios de sus futbolistas y recordó a Mbappé, que fichó por el Madrid el pasado verano: "¿Un tío como Vitinha de dónde sale? Dime un '9' que presione como lo hace Dembélé. Ousmane es un fenómeno. Es un líder desde el ejemplo. Nos hubiera encantado que hubiera estado Mbappé, que es una maravilla de persona. Hemos demostrado que tenemos estrellas y eso no es fácil. Hay que pensar en el Mundialito y en reforzarse".
Por último, Luis Enrique fue cuestionado por el homenaje que le hizo a su hija Xana al igual que el tributo de los aficionados parisinos con un tifo inolvidable. "Xana está conmigo en la victoria, pero, en la derrota, mucho más. No es momento para estar triste ni para emocionarse, porque ella estará conmigo siempre", finalizó.
Luis Enrique, ya ante los medios de comunicación, dejó muy claro quién tiene que llevarse el Balón de Oro: "Ya que toda la gente se preocupa sobre a quién le daría el Balón de Oro, voy a decir que se lo daría al señor Dembélé. Solo por cómo ha defendido en esta final. Eso es liderar a un equipo desde la humildad y el liderazgo. Se lo merece, sin ninguna duda, no solo por los títulos conseguidos y los goles sino por como ha presionado, toda la temporada y excepcionalmente en esta final".
En relación al encuentro, esto es lo que dijo el técnico asturiano: "El inicio del partido es excepcional para nosotros, aprovechamos las ocasiones de gol y dominamos el partido. Cuando marcas el tercero, hay que anotar el cuarto porque la final se podría abrir. Hoy salió todo de cara. El equipo sigue rindiendo a un alto nivel. Vamos a celebrarlo".
"Solo el hecho de estar en la final es especial. El Inter ha hecho una gran temporada. En la primera rueda de prensa cuando llegué al club, dije que el objetivo que tenía como entrenador era ganar trofeos importantes, y el único que le faltaba al PSG era la Champions. Queremos ser ambiciosos, es bonito hacer feliz a mucha gente que ni conoces. Estoy muy contento, no puedo decir otra cosa", comentó.
Y para terminar, el preparador reveló que el Mundial de Clubes es el próximo objetivo de su equipo. "Estoy seguro que será una competición increíble. Queremos rematar la temporada ganando ese título. Sería un broche de oro el poder ganar el quinto título de esta temporada", finalizó.