Golpe sobre la mesa del Barcelona ante el Dinamo de Kiev, que hace coger oxígeno al conjunto 'culé' de cara a su situación en el grupo. El técnico interino, Sergi Barjuán quiso destacar en sala de prensa la importancia de la victoria.
"En la charla previa al partido, como culé que soy, les he dicho que era un partido muy importante para el club. Hay muchos jugadores de la cantera, que lo han entendido. Lo he tirado por el sentimiento. Buscar otro tipo de guion. No sé si ha funcionado, pero al menos hemos ganado", afirmó.
Y continuó: "Los jugadores lo sabían, todo el mundo lo sabía. Se notaba en las horas previas que había tensión. La fisionomía de la cara te cambia. A partir de aquí, veremos cómo afrontamos el próximo partido. Esto te ayuda a trabajar mejor".
Además, Sergi no dudó en dedicar el triunfo al Kun Agüero: "El Kun, por lo que le he tratado, lo que necesitamos es animarlo y desearle que sea una victoria rápida. La victoria la celebraremos todos juntos. Ansu tiene eso que le diferencia, que es gol. Tiene esa calidad. Ayuda a liberar a Memphis. Cuando puedes dividir, consigues liberar jugadores".
También quiso hablar sobre su experiencia personal tras el debut en Champions League: "A nivel personal, el hecho de estar aquí representando al club que me lo ha dado todo, es la leche. Los jugadores entienden dónde están. Cada día, de alguna manera, no ganas y entras en una dinámica de preguntarte qué puedes hacer. Es cuestión de trabajo. Ahora que viene esta dinámica, hay que aprovecharla. Ver lo que hemos hecho bien para ser mejores. Creo que el partido, excepto en momentos puntuales de ida y vuelta de la primera parte, hemos estado aplicados. Creo que el equipo va creyendo en sí mismo".
"Es un jugador diferente, con uno contra uno, con profundidad y visión de juego. Te capta casi siempre a dos rivales y ve al que está liberando. Es de agradecer que los jugadores que estaban tocados han querido aparecer este partido, entre ellos él", expuso sobre la reaparición de Dembélé.
Y también tuvo palabras para Gavi: "Le he dicho cómo tenía que hacer la presión, qué quería de él y que aportara esa intensidad tan clara y fuerte que tiene".
"Lo vivo como si fuera mi equipo. Si demostrase dudas... la única manera de ir todos juntos es que yo muestre serenidad, convencerles y ayudarles a mejorar. Yo no puedo pensar si estaré mañana. Quiero a este club y quiero lo que estoy haciendo. No hay la más mínima duda", prosiguió en cuanto a su situación de interinidad.
Y concluyó con la posibilidad de continuar la próxima semana en el banquillo azulgrana: "Disfrutemos un poquito. Dios dirá si acabaré la semana en Vigo o en el Johan Cruyff. Intento aportar todo lo que sé".