Ambos llegaron en la temporada 2017-18 como los recambios para cubrir la traumática salida de Neymar rumbo al PSG.
Uno desembarcó en Barcelona ese mismo verano de 2017, mientras que el otro lo hizo en enero de 2018. Eso sí, los dos costarón cantidades astronómicas que los convirtieron en los fichajes más caros de la historia del Barça.
Ahora, tras dos temporadas en la Ciudad Condal, la última debacle europea parece que condenará a uno de ellos a abandonar el Camp Nou para afrontar con mayor garantías los distintos fichajes veraniegos.
Tanto el galo como el brasileño han dado 'motivos' para buscarles una salida, aunque todo hace indicar que, con lógica, es el actual '7' el gran candidato a poner punto y final a su etapa azulgrana.
Dembélé, en sus dos campañas, ha tenido un gran enemigo en las lesiones. Y es que el joven jugador francés se ha perdido numerosos partidos por problemas físicos.
Además, sus actos de indisciplina al principio de esta campaña también causaron un gran malestar en el club, pero su juventud, en este caso, juega a su favor.
'Dembouz' cuenta tan solo con 21 años y desde el club se consideró que no era fácil su adaptación tan joven y con un papel de estrella a un equipo de la magnitud del Barça.
De hecho, esas cuestiones extradeportivas se acabaron solventando con más mano izquierda y Dembélé, el tiempo que estuvo sano, fue uno de los mejores del equipo.
Obviamente, sus lesiones son un tema preocupante, pero no más de lo que lo fueron las de un tal Leo Messi cuando andaba también cerca de la edad actual del francés.
Por su parte Coutinho cuajó unos primeros meses bastante decentes en la Ciudad Condal y, tras el adiós de Iniesta, estaba llamado a ser el tercer o incluso segundo espada del equipo tras Messi.
El brasileño ha gozado de casi infinitas oportunidades a las órdenes de Ernesto Valverde, pero su rendimiento, lejos de mejorar, ha ido cayendo cada vez más.
Su casi nula aportación, tapada solamente con chispazos y algunos grandes goles, llegaron a desesperar a una grada que se cansó de su actitud y ha llegado ya a silbarle esta campaña.
Esta 'pelea' con la afición y su bajo rendimiento han hecho que Coutinho esté en la rampa de salida el próximo verano tras una temporada y media en la que su rendimiento ha dejado mucho que desear.
Por lo tanto, al igual que ocurrió sobre el terreno de juego cuando ambos estaban sanos, Dembélé le ha ganado la partida a Coutinho. Y esta no ha sido solo por la titularidad.