Además, la policía autonómica identificó a 36 personas. Los aficionados radicales de los dos conjuntos se pelearon con mobiliario urbano, lo que provocó la intervención de las fuerzas de seguridad.
Los radicales usaron sillas y mesas durante la agresión. El partido entre el Espanyol y el Athletic en el RCDE Stadium finalizó en empate (1-1).
El Athletic fue el primero en condenar los hechos que se produjeron en la previa del encuentro. "Creemos que una rivalidad sana, sin enfrentamientos más allá de lo deportivo y en la que solo tienen cabida las aficiones que respetan al rival por encima de cualquier condición y resultado. Tolerancia cero", escribió el cuadro vasco.
También lo hizo el Espanyol. "Toda nuestra fuerza y solidaridad a nuestro socio, herido en los incidentes previos. Condenamos cualquier miestra de violencia", escribió el cuadro 'perico'.