El nombre de Diego Llorente ha generado numerosos rumores en los últimos días en Donostia.
El defensor estaba en la agenda de varios clubes de cara a este mercado invernal, con el Mónaco siendo la entidad más interesada en hacerse con sus servicios.
Según indica 'AS', varios representantes del conjunto monegasco se desplazaron en los últimos días a San Sebastián para tratar de cerrar la operación.
El conjunto de la Ligue 1 no estaba dispuesto a abonar la cláusula de rescisión del jugador, que asciende a los 50 millones de euros, pero sí que ofrecía una suma cuantiosa.
La misma hizo dudar a la dirección deportiva de la Real Sociedad, pero finalmente decidió no aceptar la propuesta.
El principal motivo, tal y como apunta la información, es la falta de tiempo para atar a un relevo de garantías para el internacional español. Por ello, salvo sorpresa mayúscula, Llorente no se moverá de Anoeta.