Glasgow se vistió con los colores españoles para disfrutar de una final entre Sevilla y Espanyol allá por mayo de 2007. La final estuvo bastante entretenida y el tiempo reglamentario terminó con empate a dos.
El Espanyol consiguió llegar a los penaltis tras quedarse con diez muy pronto. Un tanto de Jonatas desde fuera del área mantuvo con vida a los 'pericos' hasta el final.
Adriano, Kanouté, Riera y Jonatas anotaron los goles de ambos equipos y mandaron el partido a la tanda de penaltis. Allí, Palop se convirtió en el gran héroe del sevillismo. Atajó dos penaltis y dejó el error de Dani Alves en mera anécdota.
Aquel fue el segundo triunfo consecutivo de un Sevilla que un año antes había goleado en la final al Middlesbrough. Juande Ramos era el técnico de aquel Sevilla y Ernesto Valverde el de un Espanyol que no ha vuelto a pisar una final europea desde entonces.