El Milan buscaba en San Siro una segunda victoria consecutuiva en la Serie A que espantara los fantasmas de este inicio de temporada.
El partido ante el Lecce se había puesto de cara con el 1-0 de Çalhanoglu, pero mediado el segundo tiempo el cuadro visitante incendió el coliseo milanista.
Y es que en el 62' Babacar lograba poner el 1-1 en el electrónico a pesar de los grandes esfuerzos de Donnarumma por evitarlo.
El guardameta italiano detuvo un penalti previo al tanto con una buena estirada, pero no pudo hacer nada en el rechace para desviar nuevamente el esférico.
Sin embargo, en el tramo final del duelo, Piatek apareció para culminar una gran jugada de Çalhanoglu y poner el 2-1 en el marcador que devolvía el aire al cuadro lombardo.