En la primera fase de la temporada, Radu Dragusin era un fijo en los onces iniciales de las grandes ligas. Trabajaba por debajo del radar en un Genoa en el que no terminaba de llamar la atención del ojo del aficionado general, pero sí de las direcciones deportivas. Asentado en el eje defensivo de los italianos, colaboró en alejarlos de los puestos de descenso para afianzarlos en una tierra de nadie en la que aún están afincados.
En invierno, el Tottenham Hotspur pagó 30 millones de euros por él y su rol cambió. Tenía que competir con Micky van de Ven por el puesto en una línea en la que Ante Postecoglou ha cimentado una mejora muy llamativa por parte de un equipo del que se esperaban más urgencias tras despedirse de Harry Kane el verano pasado. El neerlandés partía como favorito -había aterrizado en agosto de 2023 por 40 'kilos'- y tan solo sus problemas en el tendón de la corva le ofrecieron una oportunidad al rumano.
Este salió de inicio en un par de partidos de marzo, frente al Fulham fuera de casa y ante el Luton Town como local. Su propio entrenador fue preguntado por este paso adelante en la antesala del viaje a Craven Cottagge y jugó con las ganas de los periodistas de conocer su pizarra: "Le quitaré suspense. Sí, saldrá de inicio". Así, y con una llamada internacional para unas citas amistosas ante Irlanda del Norte y Colombia de por medio, el ex del 'Calcio' vislumbraba una ocasión ideal para rebasar a su compañero y contrincante en el orden de favoritos de su jefe.
Desafortunadamente para él, ya ha transcurrido un mes desde entonces y no parece que sorprendiera al estratega. En cuanto su homólogo de Países Bajos estuvo en forma de nuevo, regresó a sus alineaciones al instante y le relegó, de nuevo, a un plano secundario. No pisa el césped desde el 30 de marzo y lleva tan solo 2 de 6 encuentros de comienzo con el Tottenham. En Génova, solo se perdió 2 de los 62 esquemas de los que formó parte en una temporada y media.
January 11, 2024
Cuatro años, cinco equipos
Otro plano de la historia de Dragusin por el que este periodo de su carrera en Inglaterra es tan importante estriba sobre un asunto que ha sido recurrente a lo largo de su aún corta trayectoria: la estabilidad. Con tan solo 19 años, debutó con el sénior de la Juventus tras formarse en su país para, en cuestión de dos campañas, verse cedido en la Sampdoria, la Salernitana y el Genoa, que terminó abonando 5 millones de euros a las arcas de Turín para quedárselo a largo plazo.
Aquella decisión pareció la base de un futuro a largo plazo cuyas bases quedaron bien cimentadas en sus dos primeros cursos, pero el camino se ha visto interrumpido por su fichaje por el Tottenham, en el que ha vuelto a un ostracismo que ya conoció en su carrusel de préstamos cuando aún pertenecía a la estructura 'bianconera'. Así, dar un paso adelante se presenta clave para no verse inmerso en otra situación similar.
También es una potencial solución que, para este periodo de su vida deportiva, acepte un papel menos protagonista y se centre en ser útil desde una mirada un poco más apartada en Inglaterra. Con 22 años y contrato hasta verano de 2030, su estancia en Gran Bretaña no respira precariedad: debe tratarse pensando en todo lo que resta de década. De hecho, cuando termine su vinculación con el equipo, ya habrá contado 28 primaveras.