A la Juventus le costó el duelo con el Brescia, y eso que tuvo superioridad numérica por la expulsión de Ayé por doble amarilla. Justo por la falta que provocó Ayé llegó el tanto de la 'Vecchia Signora'.
Dybala mimó el balón en el interior del balcón del área, a sabiendas de que era una opción muy clara para hacer el primero al estar en el sitio que más le gusta.
Con un golpeo seco y a media altura, Andrenacci no pudo hacer nada para evitar el tanto. El portero que entró por Alfonso se quejó de que la barrera no hizo su función e hizo la estatua.
El argentino logró así su docena de goles en lo que va de temporada en 31 partidos en un partido sin Cristiano Ronaldo por descanso.