El azar quiso que el Málaga-Deportivo del pasado 8 de julio coincidiera con la boda de Alberto Romero, un aficionado blanquiazul de pro. Su paso por el juzgado fue horas antes, aunque bien parecía que tuvo lugar en La Rosaleda, puesto que dio el "sí, quiero" vestido con la primera equipación de esta temporada.
El chico había prometido casarse de esa guisa y cumplió con su palabra; también contó con el visto bueno de la que ya es formalmente su esposa.
Por si fuera poco la feliz noticia, pudo celebrar luego un gran triunfo ante el Deportivo que dejó la salvación casi hecha.
"¡No dudábamos de tu palabra, Alberto! Imposible ir más alegente. El azul y el blanco siempre son un acierto. ¡Enhorabuena, pareja! Os deseamos toda la felicidad del mundo. ¡Vivan los novios", fue la felicitación del club.
July 8, 2020