El Alavés tiene motivos para creer en la salvación. Javi Calleja ha sacado del fuego una papeleta que tenía muchos problemas de arder tras un inicio de temporada horroroso. Pero ya van tres victorias y el equipo ha salido del descenso.
Se antojaba más que importante el triunfo ante un rival directo como es el Elche, que tenía la oportunidad de asestar al Alavés un golpe durísimo y ante su afición. Unos puntos que le hubieran permitido dar un salto para mirar la zona noble de la clasificación.
Pero el Alavés entendió mejor lo que requería el partido, que significaba el regreso de Lucas Pérez a Mendizorroza tras su pelea con el Pitu Abelardo la temporada pasada. El gallego fue titular, aunque no estuvo cómodo ante el buen hacer defensivo de los albiazules.
La primera parte estuvo más igualada, con un Alavés que buscaba el dominio de la posesión y el Elche no se la jugaba en absoluto en su zona de confort. A partir de una buena presión llegaron opciones de gol para Pellistri y Joselu, aunque Kiko Casilla estuvo fino para intervenir en momentos clave.
Solo Boyé gozó de un buen disparo antes del descanso, tras una buena combinación con Lucas Pérez. Pacheco, que en el tramo final del partido fue sustituido por Sivera, paró todo lo que le llegó a sus inmediaciones. Pero todo se decidió en el inicio del segundo tiempo...
A los pocos segundos tras la reanudación, Kiko Casilla evitó el 1-0 de Joselu, pero no lo conseguiría en el siguiente córner: Laguardia peinó en el primer palo y Loum fusiló en el segundo palo para hacer el importantísimo gol de la noche en Vitoria. Una jugada mil veces repetida.
El Elche creció con el balón, una posesión que le regaló el Alavés para hacerse fuerte en su campo. Y lo logró el equipo vasco, superior en ambas áreas y más centrado que su rival, algo impotente cada vez que se asomaba al área de Pacheco y en el último pase.
La acción que pudo cambiarlo todo llegó en el minuto 80, cuando Gumbau, que acababa de entrar, puso un mal centro de falta que tocó de espuela un futbolista ilicitano y, tras rechazar en Lejeune, Carrillo marcó con una acrobática maniobra al borde del área pequeña. Sin embargo, el VAR intervino y Gil Manzano decidió tras ver la repetición que era fuera de juego.
Pudo finiquitar el partido el Alavés en los últimos compases de juego, sin embargo, Édgar estuvo poco afortunado de cara a portería y algo individualista en uno de los últimos ataques. El 'Glorioso' se acabó quedando con los puntos, ya mira desde fuera el descenso y mete al Elche en la lucha.